Comentario: Hay muchas preguntas sin responder aún. EEUU., Ucrania, y los poderes alineados de Occidente, no han esperado ninguna investigación, ni recolección de evidencia, para hacer acusaciones categóricas sobre Rusia como culpable del siniestro aéreo. Esta sospechosa actitud no sólo nos sugiere una fuerte campaña mediática contra de la potencia opositora a la hegemonía Occidental, sino también una urgencia por dar el primer golpe y ensuciar el campo de juego... La sensación "flotando en el aire" es que se trata de una operación de encubrimiento de similares características, aunque en una escala menor, a la perpetrada en los eventos del 11-S. Y por lógica podemos suponer que si existe una operación de encubrimiento, quienes la llevan adelante tienen muy en claro qué es lo que ha provocado la explosión del vuelo del MH17 y no quieren que se sepa.
"Es difícil creer que el traslado de varios sistemas de misiles Buk de Rusia a Ucrania y luego de vuelta a Rusia no fuera detectado, teniendo en cuenta la atención con la que la inteligencia de EE.UU. ha estado observando el este de Ucrania en los últimos seis meses", escribe el periodista en el portal independiente consortiumnews.com.
Según Parry, incluso admitiendo las posibles limitaciones técnicas los satélites norteamericanos tendrían que detectar la circulación de estos objetos de gran tamaño. Además, el avión fue derribado durante el día y no de noche, cuando es posible ocultar una batería de misiles.
De acuerdo con una fuente que cita el periodista en su publicación, lo más probable es que las agencias de inteligencia estadounidenses recibieran las imágenes satelitales de la zona, que por su parte mostraban el lanzacohetes propiedad de las tropas de Kiev, por lo que al Gobierno de Obama le resultaría desfavorable hacerlas públicas.
Sin embargo, los medios occidentales no exigen detalles específicos de Washington, sino que solo "difunden propaganda" diciendo que el sistema Buk era ruso, algo que, según Parry, influye sobre los estadounidenses desinformados.
Comentario: Es muy significativo que Ucrania quiera obtener ante EE.UU. el mismo status que Israel. Es lógico pensar que Ucrania no sólo esté buscando obtener los beneficios que implica esta condición, sino que además exista cierta sintonía (posiblemente una gran simpatía) con la naturaleza depredadora, racista, e inhumana del Estado de Israel. No hay que ser un gran analista para notar las obvias similitudes entre uno y otro:
- Ucrania ha dado claras muestras de que una fuerte corriente nazi sobrevive en su interior y hoy día se encuentra al frente del gobierno. Vea por ejemplo: - Israel es hoy por hoy el mayor exponente del viejo nazismo (aunque suene paradójico). Sus prácticas hacia los árabes en general, y los palestinos en particular, son idénticas a las prácticas de la alemania nazi en relación al pueblo judío. El exterminio como objetivo, y el trato inhumano, el hostigamiento, y el asesinato como práctica de rutina, son su Leitmotiv, su razón de ser. Vea por ejemplo: Esta "sintonía" puede deberse, claro, al hecho de que Israel está detrás del golpe de Estado en Ucrania también. Si Poroshenko y sus "compinches" son títeres de Washington y la CIA, dada la historia de la CIA y el MOSSAD, entonces también son títeres de Israel, que intenta mantener un perfil bajo pero muy bien podría estar conduciendo la orquesta.