Traducido al castellano por A. Mondragón para La Tribuna Hispana USA© Desconocido
Como escribió recientemente el Dr. Paul Craig Roberts: "
Quienquiera que gane la elección de noviembre, será una derrota para el pueblo norteamericano". Y la razón es que los políticos electos a la Casa Blanca y el Congreso, como buenos criados obedientes, sólo obedecen a los súper ricos y sus voceros de Wall Street.
Los altos jefes en Wall Street han publicado sus órdenes al gobierno de Obama y el Congreso de Obama para reducir drásticamente el déficit federal, en una carta de advertencia de que si fallan en tomar acción al 1 de enero del 2013, podría producir una renovada crisis financiera y depresión económica.
Mientras que no explica ninguna medida en particular a ser adoptada, la carta pide "pasos concretos para restaurar el fundamento fiscal de los Estados Unidos a largo plazo" y "leyes que restauren verdaderamente la solidez fiscal de la nación a largo plazo".
Éstas son palabras en clave para el destripamiento de la Seguridad Social, del Medicare, del Medicaid y de otros programas sociales.Los banqueros repitieron las amenazas ya dadas por las agencias de valoración de bonos S&P y Moody's, las cuales han dicho que podrían descalificar la deuda de los EE.UU., incluso más, sí no hay un acuerdo de los dos partidos para evitar el llamado "acantilado fiscal" al 1 de enero. S&P bajo la calificación de la deuda de los EE.UU. en agosto del 2011, y Moody's ha emitido una advertencia de tomar una acción similar.
La carta fue firmada por 15 CEOs (Jefes Ejecutivos) de los bancos, compañías de corretajes y seguros y por el jefe del Financial Services Forum, el cabildo de la industria. Entre los signatarios es Jamie Dimon, CEO de JP Morgan Chase; Lloyd Blankfein, CEO de Goldman Sachs; Michael Corbat, el nuevo CEO de Citibank; John Stumpf, CEO de Wells Fargo; y Brian Moynihan, CEO de la Bank of America.