Fuego en el Cielo
El cometa se evaporó enseguida, pero tras el impacto se produjo una fuerte emisión de plasma solar. Según informa la agencia rusa RIA Novosti , este "cometa suicida" era una de las partes de un gran cometa que se descompuso hace varios siglos. Los cometas que están cerca del Sol son conocidos como "rasantes del sol tipo Kreutz", y fueron descubiertos por primera vez durante el eclipse solar de 1882. Se cree que hoy en día existen al menos un mil cometas de este tipo.
No obstante, la explosión aparentemente no está relacionada con el cometa, según los astrónomos de la NASA. Se trata, según el portal de ciencia Fayer Wayer, de una eyección de masa coronal que ocurre de vez en cuando en nuestra estrella.
Una tormenta gemomagéntica es una perturbación temporal de la magnetósfera terrestre, y está generalmente asociada a una CME (Eyección de masa coronal) del Sol. Estas pueden afectar las telecomunicaciones, los satélites y los aparatos de los aviones, e incluso producir apagones eléctricos.
La última reunión de la Organización Meteorológica Mundial (WMO, en sus siglas en inglés) acaba de reconocer, en la realización de su XVI Congreso Global preparedness for Space Weather Hazards en Ginebra, la vulnerabilidad creciente de la Tierra con respecto al clima espacial.
La web que informa detalladamente sobre estos sucesos www.swpc.noaa.gov, se encuentra nuevamente offline, situación que se viene repitiendo para los últimos sucesos de importancia relacionados a la materia.

NO ES EL ÚNICO. Las características de la pieza asombraron a los investigadores. Cerca de este lugar existen otros 15 cráteres de impacto, producto de una lluvia producida en una zona de 80 kilómetros por 20 kilómetros.
El cuerpo celeste que a principios de abril se salvó de ser robado por traficantes, en un campo ubicado a 70 kilómetros de Quimilí, puede estar entre los quince meteoritos más grandes del planeta, según investigadores de la Asociación Chaqueña de Astronomía, quienes trabajaron durante el fin de semana en el lugar y se mostraron asombrados por el "excelente estado de conservación".
Tras dos días de trabajo en el campo Eduvigis, cerca del límite con Chaco, se logró descubrir totalmente esta pieza que durante más de 4.000 años permaneció enterrada a tan sólo dos metros de profundidad y conserva aún detalles increíbles del ingreso a la atmósfera terrestre.
"Sin temor a equivocarme, este meteorito está entre los 15 más grandes del mundo. De eso estoy seguro, pero lo mejor de todo es que en territorio santiagueño puede haber otros todavía más grandes", dijo entusiasmado a EL LIBERAL el presidente de la Asociación Chaqueña de Astronomía, Mario Vesconi, quien junto con Carlos Cerutti coordinaron los trabajos en el lugar por pedido del Ministerio de la Producción de la provincia, con cuyas autoridades ya habían planificado hace tiempo una serie de acciones en esta misma zona.
"De momento, el meteorito Chaco, que tiene 37 toneladas, es el segundo más grande del mundo, pero hay cráteres en Santiago del Estero que están señalados por los mapas magnéticos que tienen meteoritos muy grandes. Es más, los que encontramos en la parte santiagueña están mejor conservados que en el lado chaqueño, eso se explica porque el terreno de Chaco está nueve metros más abajo, eso hace que los meteoritos estén más degradados por la oxidación", explicó.
Astrónomos del Marshall Space Flight Center de NASA registraron uno de los meteoritos más brillantes vistos por su red en casi tres años de operativos. El 20 de mayo del 2011 a las 9:47 p.m. CDT, un fragmento de un cometa desconocido de seis pies de diámetro entró en la atmósfera aproximadamente 66 millas sobre la ciudad de Macon, Georgia viajando al noroeste a una velocidad de unas 24 millas por segundo (86,000 mph). A esta velocidad, el fragmento poseía la energía o poder de impacto de unas 500-1000 toneladas de TNT.
Un nuevo video producido por sott.net:

El paso del bólido generó una gran impresión en la ciudadanía y muchos lo asociaron con la creencia en el fin del mundo. Esta fotografía fue tomada en Ñeembucú.
Los bólidos son generalmente restos de asteroides o desechos espaciales, según explicó el profesor Blas Servín, director del Centro Astronómico Bicentenario. El fenómeno celeste ocurrió aproximadamente a las 18:30 del viernes y pudo ser observado por segundos, pero generó una gran conmoción y muchos lo asociaron con la creencia del fin del mundo.
Servín explicó que esta clase de fenómenos son completamente normales, aunque muy poco visibles. "Las personas que lo vieron deberían sentirse privilegiadas porque son acontecimientos imprevisibles, de muy corta duración y que cuando ocurren durante el día nadie se percata de ellos", explicó Servín.
Así también sostuvo que "ningún fenómeno astronómico tiene relevancia en la vida del hombre, en la tierra ni mucho menos en el fin del mundo".
No se recibió ninguna señal de auxilio desde la aeronave y casi dos semanas después, los oficiales de aviación aún tienen que brindar una explicación coherente sobre qué pudo haber causado el repentino final del avión de pasajeros de alta tecnología Airbus 330-200.
Como siempre, los medios están pasando por alto (u ocultando) algunos obvios y comprensiblemente perturbadores datos acerca de la naturaleza de las amenazas a la vida sobre el planeta tierra, y como sucede habitualmente, es tarea de Sott.net profundizar en los detalles.
La información preliminar indica que sería una aeronave Saab 340 biturbo, con 18 pasajeros, dos pilotos y una azafata, que había partido de la ciudad de Neuquén y tenía como destino Comodoro Rivadavia, en la provincia de Chubut-Argentina.
Que un objeto volador similar a una bola de fuego naranja cruzó el cielo de esa ciudad, desde el sudoeste hacia el este, pero no se pudo establecer el origen del fenómeno. Fuentes policiales confirmaron que a las 2.30 de la madrugada, el Sistema de Emergencias 911 recibió numerosos llamados de distintas zonas de la ciudad que reportaron la visión de un objeto indefinible, similar a una bola de fuego,sobrevolando el cielo.
Las denuncias coincidían en señalar que el objeto circuló desde la zona sur hacia el este de la ciudad, y que desapareció detrás del cerro San Bernardo, dejando una estela en el cielo. Personal policial se movilizó por la zona, sin poder hallar ningún objeto ni una pista en la zona que explicará el origen del fenómeno.
Los habitantes se comunicaron con distintas emisoras radiales para describirel fenómeno, que también se observó en otras localidades como Cachi y El Carril, y la zona del dique Cabra Corral.
Comentario: Para comprender la relevancia de noticias de esta naturaleza y ubicarlas en contexto, recomendamos leer los artículos de la serie "Cometas y Catástrofes". El primero de ellos puede accederse desde aquí.