Cambios Planetarios
En un informe sobre la actividad del volcán chileno y su impacto para la Argentina, los científicos afirman que la erupción iniciada "es comparable con los registros geológicos de erupciones acaecidas" en los últimos 10.000 años. Una situación similar a la de Villa La Angostura "se da en la zona de Ingeniero Jacobacci y área rural circundante, donde el espesor de ceniza caída y la continuidad con el transcurso de los días la torna en la mayor erupción histórica que afectó la zona".
El estudio determinó que el "material tamaño ceniza y polvo volcánico es de composición ácida, compuesta por más de un 70% de sílice".
Si bien la ceniza volcánica no es tóxica en su composición, contiene atrapados en forma de microburbujas gases con flúor, azufre y cloro que, aún en pequeñas concentraciones, al entrar en contacto con el agua, reaccionan formando ácido clorhídrico, sulfhídrico y fluorhídrico.
Bariloche no puede salir de su crítica situación por la caída de cenizas provenientes del sistema volcánico Puyehue.
Durante la noche del últimos lunes, parte de la enorme columna cenizosa arreció sobre la ciudad, mientras el Servicio Nacional de Geología y Minería mantiene el nivel de alerta roja ante la posibilidad de que se produzcan otras situaciones similares.
"La actividad eruptiva - señala el informe - ha iniciado un proceso diferente, mostrando inestabilidad en el sistema, marcada por la oscilación en la actividad sísmica y la altura de la columna eruptiva, fenómeno al que se le hace un seguimiento detallado. Es posible que vuelva a presentarse un incremento en la actividad eruptiva con episodios similares a los ya ocurridos o superiores en intensidad. Por lo tanto se conserva el nivel de la alerta volcánica en Nivel 6 - Rojo: erupción moderada", explica el informe de ese servicio.
Desde el 2006 los apicultores empezaron a notar que las abejas estaban muriendo. Los científicos le llaman Trastorno del Colapso de las Colonias y aunque no saben el porqué, estos insectos simplemente se mueren y en la mayoría de los casos lo hacen sin dejar rastro, sólo desaparecen. De hecho muchos apicultores en Estados Unidos han perdido más del 90% de sus colmenas.
Históricamente, cuando algo afecta a los enjambres hay muchos insectos muertos, pero en estas desapariciones no hay cuerpos. Además, quienes abandonan el panal son las abejas obreras, quienes se dan a la fuga dejando a la reina atrás, en un comportamiento de lo más atípico.
Conforme el ciclo actual de manchas solares, el Ciclo 24, empieza a aumentar hacia su máximo, estudios independientes del interior solar, superficie visible y la corona indican que el próximo ciclo solar de 11 años, el Ciclo 25, se verá muy reducido o puede que no tenga lugar siquiera.
El Sol por Hinode
Los resultados se anunciaron en la reunión anual de la División de Física Solar de la Sociedad Astronómica Americana, que tiene lugar durante esta semana en la Universidad Estatal de Nuevo México en las Cruces: http://astronomy.nmsu.edu/SPD2011/
"Esto es tremendamente inusual e inesperado", dice el Dr. Frank Hill, director asociado de la Red Sinóptica Solar de NSO, sobre los resultados. "Pero el hecho de que tres visiones completamente distintas del Sol apunten a la misma dirección es un potente indicador de que el ciclo de manchas solares puede entrar en hibernación".
La región Sur de Río Negro y Neuquén continúa en estado de emergencia a raíz de nuevas emanaciones provenientes del complejo volcánico Puyehue- Cordón Caulle.
Fuentes de Defensa Civil informaron que "en este momento siguen cayendo cenizas", y que todo se complicó en horas de la madrugada a raíz de una intensa lluvia que arremetió cerca de las 3 y media de la mañana.
Según Pablo Ortega, secretario general de la Dirección de la Aeronáutica Civil (DGAC) chilena la pluma volcánica avanza hacia el este a unos 100 kilómetros por hora y entraría nuevamente a Chile el fin de semana próximo por la Región de Aysén.
"La nube estaba, ayer en la tarde, al sur de la Isla de Pascua, luego de atravesar cielo neozelandés y seguir su rumbo por el Océano Pacífico", explicó Ortega al diario chileno La Tercera.
"La pluma ya está a la altura de Rapa Nui (capital de la chilena Isla de Pascua) y nos estaría golpeando por la espalda el sábado" sostuvo.

Una importante cantidad de cenizas volvió a caer sobre Villa La Angostura y se mantiene el alerta roja
El panorama es complicado y la nueva caída de cenizas, sobre todo ayer por la tarde, lo que hizo fue profundizar los trastornos.
La amplia mayoría de los barrios permanecen sin electricidad desde el sábado por la noche. La falta de energía provoca problemas con la conservación de alimentos o la calefacción central que tienen muchas viviendas. A los comercios les impide abrir sus puertas.
Ayer, un sector tenía electricidad y a las 19 se pudo reponer el servicio con la línea que alimenta hasta la zona del puerto y los barrios cercanos.
Sin embargo, desde la central térmica del EPEN indicaron que lamentablemente fallaron las pruebas posteriores en las que se intentó restablecer el servicio en otros sectores.
Explicaron que la ceniza que cae destruye los aisladores que soportan los cables porque entran en cortocircuito.
Por eso, el personal debe recorrer kilómetros de líneas de media tensión y estructuras para revisar los aisladores, limpiarlos o cambiarlos y realizar las pruebas.
Un grupo de investigadores españoles ha puesto cara y nombre a uno de los parásitos que está causando la muerte de miles de abejas productoras de miel. Se llama "Nosema ceranae" y es un hongo que infecta a los insectos por vía digestiva, creando un proceso de enfermedad crónica que en dos años los sentencia a muerte. Es el llamado "Síndrome Despoblamiento de Colmenas", un fenómeno que sólo en España eliminó el año pasado al 50% de las colmenas. No obstante, según Luis Sanz, director del Centro Apícola Regional de Castilla-La Mancha, en Marchamalo (Guadalajara), "lo mejor no es hablar de síndrome sino de enfermedad".
El parásito "Nosema ceranae", procedente de Asia, provoca una enfermedad crónica, de la que la abeja se contagia en los puntos donde bebe, recolecta el néctar o incluso en la propia colmena donde existen restos de heces. Con todo, el investigador advierte que es importante otro foco de contagio: las bolas de polen, alimento proteico de las abejas elaboradas con saliva, y que puede estar contagiada con esporas de dicho parásito.
En la fase inicial del contagio, explica Sanz, el parásito alcanza el aparato digestivo de las abejas, por lo que éste deja de funcionar y el insecto no come. A consecuencia de ello, se debilita y por último muere. Las abejas que salen a recolectar polen son las más parasitadas, al estar más expuestas al contacto con el hongo. Debido a la infección, se extenúan más a la hora de realizar el trabajo, producen menos miel y acaban pereciendo en en el campo. De ahí que el apicultor no perciba la muerte de sus abejas hasta que ya es demasiado tarde. Aún así, insiste el científico, la aparición de la enfermedad no significa que el enjambre entero vaya a morir, sino que lo que primero se detecta es que baja la capacidad productiva de la colmena.

Fotografía facilitada por la NASA de la superficie solar y su atmósfera. Hoy la agencia espacial norteamericana ha presentado por primera vez estas imágenes, que darán una visión del astro en torno al que gira nuestro sistema planetario y que ayudarán a mejorar las predicciones climatológicas.
Los expertos han llegado a esta conclusión tras estudiar la estrella y detectar un descenso de las manchas solares de la superficie y una menor actividad cerca de los polos lo que, según han señalado, determina un descenso de su actividad e incluso "una hibernación del Sol" para el próximo ciclo solar, es decir, en los próximos 11 años.
La NASA ya había alertado de esta posibilidad a principios de año, después de que uno de sus equipos científicos detectara una inactividad solar en los últimos tres años. En este sentido, el científico de la NASA Richard Fisher ha apuntado que el ciclo solar, que suele durar alrededor de 11 años, tiene sus periodos naturales de baja actividad, sin embargo, ha señalado que este mínimo solar ha sido "históricamente lento" y está durando "más de lo habitual".
La ciudad fue sacudida el lunes poco después del mediodía por un sismo de magnitud 5,2 cuyo epicentro se situó a 10 km de Christchurch y a 11 km de profundidad. Unos minutos después se produjo un segundo temblor, más violento, de magnitud 6, con epicentro a 14 km de la ciudad y a 11 km de profundidad.
El 22 de febrero Christchurch fue sacudida por un temblor que dejó 181 muertos y destruyó gran parte del centro de la ciudad.