El Gobierno de Macri se rinde ante el Reino Unido y abandona el reclamo histórico de Argentina de un vuelo directo a las islas Malvinas.
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El pasado martes, la ministra argentina de Exteriores, Susana Macorra, y el vicecanciller británico, Alan Duncan, emitieron una declaración conjunta sobre Malvinas, territorio que corresponde históricamente a Argentina, pero que Londres mantiene bajo tutelaje colonial.

A 17 años del último comunicado conjunto de ambos países, se contempla la posibilidad de que haya vuelos entre las islas y terceros países, es decir, que no serían vuelos que conectaran el territorio continental argentino con el archipiélago.

En la actualidad hay un vuelo semanal de una aerolínea chilena que sale de este país vecino y que una vez al mes hace escala en la provincia argentina de Santa Cruz (sur), tanto a la ida como a la vuelta, lo que suma dos escalas por mes.

Ahora, con el nuevo acuerdo entre el Gobierno británico y el del presidente argentino, Mauricio Macri, se señala la posibilidad de sumar un segundo vuelo con escalas, duplicando de dos a cuatro las escalas mensuales en el continente argentino.

Según el excanciller argentino Jorge Taiana (2005-2010), en estos últimos años Argentina ha buscado y hasta estuvo por lograr que el segundo vuelo fuera de una aerolínea de bandera argentina y desde territorio continental a las islas.

Sin embargo y con este último acuerdo, Argentina no sólo abandona ese objetivo, sino que además "se les va a permitir que más vuelos de terceros países atraviesen el espacio aéreo argentino a cambio de dos escalas por mes en territorio continental".

"Argentina ha cedido a la pretensión de conseguir un vuelo desde el territorio continental a las islas", lamenta Taiana, ahora presidente del Parlamento del Mercosur (Parlasur), en una entrevista con medios rusos publicada este viernes.

A su modo de ver, la referida declaración conjunta deja de lado la cuestión de la soberanía, reclamo que Argentina tiene consagrado en su Constitución como "permanente e irrenunciable". Ahora, este reclamo "queda totalmente excluido como tema de conversación".