Se espera que ambos líderes aborden tanto asuntos internacionales como las relaciones bilaterales entre sus países que, como ha admitido Putin, "no están en su mejor momento".
El Kremlin y la Casa Blanca
han confirmado los detalles del próximo encuentro que celebrarán el presidente de Rusia,
Vladímir Putin, y su homólogo de Estados Unidos,
Donald Trump: ambos líderes se reunirán durante varias horas en Helsinki (Finlandia) el próximo 16 de julio. ¿Qué temas tratarán?
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Moscú ha indicado que la conversación se centrara en "el estado actual y las perspectivas de desarrollo de las relaciones rusoestadounidenses, así como en temas actuales de la agenda internacional", sin proporcionar más detalles.
Desde hace meses se especula con una posible cumbre de Putin y Trump y con los contenidos que abordarían. El mandatario estadounidense
mencionó varias veces esta opción desde el mismo día en que
felicitó al líder ruso por su reelección el pasado marzo y afirmó que, posiblemente, hablarían de
"una carrera armamentística que está fuera de control", así como sobre
Siria, Ucrania y Corea del Norte.
De hecho, es muy probable que la agenda de la cita en la capital finlandesa incluirá el conflicto en territorio sirio o la desnuclearización de la península coreana, sobre todo a raíz del
ataque de EE.UU., Francia y Reino Unido contra Siria o la
cumbre de Donald Trump con el líder de Corea del Norte,
Kim Jong-un.
Yuri Ushakov, asesor del presidente de Rusia, ya supuso que Vladímir Putin y Donald Trump tratarían
"las relaciones bilaterales [ente Rusia y EE.UU.], la normalización siria, la estabilidad internacional y el tema del desarme", aunque agregó que podrían realizar una declaración conjunta para "trazar los siguientes pasos de ambas partes", tanto en su relación mutua como en el ámbito internacional.
El contexto no es el más adecuado, ya que a las divergencias políticas se han añadido tensiones económicas, después de que los aranceles que ha impuesto EE.UU. también
afectaran a Rusia. El propio Putin
lamentó que las relaciones entre Moscú y Washington "no están en su mejor momento" como
consecuencia de las "luchas políticas internas en EE.UU." durante la reunión que mantuvo con el consejero de Seguridad Nacional de Trump, John Bolton, el pasado 27 de junio.
Por su parte, Bolton aseguró que el inquilino de la Casa Blanca
opina que
la cumbre de Helsinki "beneficiaría tanto a EE.UU. como a Rusia", debido a que "facilitaría la paz y seguridad en todo el mundo".
Este encuentro de Helsinki tendrá lugar justo después de la cumbre de la OTAN y parece que no ha sentado muy bien entre sus integrantes europeos. Por ejemplo, Reino Unido teme que Trump "debilite" a la Alianza si alcanza "un 'acuerdo de paz' con Putin", asegura el periódico británico
The Times. En concreto, Washington podría reducir sus compromisos militares, disminuir su despliegue en Europa y hasta suspender su participación en maniobras conjuntas.
Al respecto, el analista internacional Carlos Martínez considera que, en ocasiones, da la impresión de que a los países europeos les interesa más que a EE.UU. mantener el régimen de predominio global norteamericano.
Comentario: ¡Qué ironía! Europa parece haberse tragado la propaganda antirrusa de EE.UU. y ahora que Trump da un paso hacia mejorar las relaciones, se quejan de algo que finalmente los beneficiaría a ellos. ¿Acaso no aprendieron nada de las pésimas consecuencias que tuvieron las sanciones antirrusas para Europa?
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María Zajárova, por su parte ha dejado claro que no debemos tener muchas expectativas con respecto a lo que se puede lograr con esta cumbre: