Revelan que el príncipe heredero saudí, Muhamad bin Salman, ordenó una operación para facilitar la vuelta de Yamal Jashoggi al reino para luego detenerlo ahí.

bin Salman
© AFPEl príncipe heredero saudí, Muhamad bin Salman, saluda a dignatarios kuwaitíes en el Palacio Al Bayan, Kuwait, 30 de septiembre de 2018.
La Inteligencia estadounidense ha interceptado a funcionarios saudíes, discutiendo un plan sobre cómo "tentar" al periodista Jashoggi para que vuelva a Arabia Saudí de su casa en el estado de Virginia (este de EE.UU.), para luego detenerlo, según publicó el miércoles el diario estadounidense The Washington Post.

Un exagente de la Inteligencia estadounidense, que habló en condición de anonimato, detalló que la operación, la llevaron a cabo dos equipos compuestos por 15 hombres en total, que llegaron y salieron de Turquía en dos aviones privados en diferentes ocasiones.

La nueva revelación, hecha por funcionarios estadounidenses familiarizados con el caso, supone, según la fuente, "otra evidencia" de la implicación de los Al Saud en la desaparición del columnista de The Washington Post luego de entrar a la sede consular saudí en Estambul (Turquía) el pasado 2 de octubre.

Aunque Riad asegura que el periodista abandonó ese mismo día sus instalaciones, las autoridades turcas insisten en que no hay pruebas de que Jashoggi saliera de la misión diplomática saudí.

El diario estadounidense añade que, varios amigos de Jashoggi, por su parte, han afirmado que durante los últimos cuatro meses, altos cargos saudíes, cercanos a la monarquía, habían llamado al periodista para ofrecerle "protección" e incluso "un puesto de alto nivel" en el Gobierno, si aceptaba volver a Arabia Saudí.

Jashoggi, un férreo crítico de las políticas de los Al Saud, no obstante, se mostraba "escéptico" de las ofertas. El periodista, según reseña The Washington Post, había indicado a uno de sus amigos que "el Gobierno saudí nunca cumpliría con sus promesas de no dañarlo".

"Decía: ¿está bromeando? Yo no tengo confianza en ellos", recordó Jaled Safuri, un activista árabe-estadounidense, las palabras de Jashoggi en una charla en mayo pasado, después de que el periodista recibiera una llamada telefónica de Saud al-Qahtani, un asesor de la monarquía.

El periodista es un exasesor del Gobierno saudí que se autoexilió el año pasado en Estados Unidos para evitar su posible detención, dadas sus críticas a la política adoptada por los Al Saud, en particular a la agresión militar saudí a Yemen.