Traducido por el equipo de SOTT.net en español

Contra todo pronóstico, las islas de arrecifes de baja altitud parecen estar creciendo en algunas partes del mundo, a pesar de la subida del nivel del mar, aumentando su huella y desafiando las predicciones del día del juicio final.
Jeh Island big rising sea level
© USDALa isla de Jeh hoy, con su contorno de 1943 en rojo.
El geomorfólogo Murray Ford de la Universidad de Auckland en Nueva Zelanda dirigió un equipo de investigadores que examinó la isla Jeh, una de las 56 islas que componen el atolón de Ailinglaplap en las Islas Marshall, una de las naciones más amenazadas de la Tierra.

Ford y su equipo analizaron las imágenes aéreas y satelitales de la isla desde arriba e hicieron el sorprendente descubrimiento de que Jeh no sólo ha aumentado su superficie total en un 13% desde 1943, sino que en realidad puede haber sido una vez cuatro islas separadas que ahora se han transformado juntas debido a las ganancias netas de masa terrestre.

"En contra de las predicciones, la cobertura popular de los medios de comunicación y las proclamaciones políticas, estudios recientes han demostrado que la mayoría de las islas de arrecifes estudiadas se han mantenido estables o han aumentado de tamaño desde mediados del siglo XX", explica el equipo de investigación de la Universidad de Auckland en Nueva Zelanda, dirigido por Ford.

Según el geomorfólogo y sus colegas, las predicciones más funestas sobre el aumento del nivel del mar se basaban en la suposición de que las islas son estáticas e invariables y, por lo tanto, simplemente se ahogarían una vez que las mareas subieran lo suficiente.

El equipo de investigación descubrió que las islas crecieron gracias al material orgánico recientemente generado por el arrecife y no a los sedimentos arrastrados tierra adentro por las mareas.
jeh island
© US National ArchivesLa isla de Jeh en 1943, con el contorno de hoy en rojo.
"Los arrecifes de coral que rodean estas islas [son] la sala de máquinas del crecimiento de la isla, produciendo sedimentos que son arrastrados por la costa de la isla", explica Ford. "Los arrecifes de coral saludables son esenciales para que este proceso continúe en el futuro."

Investigaciones que se remontan al año 2018 encontraron que entre 30 atolones de coral, que representan más de 700 islas en total, el 88,6 por ciento permaneció estable o aumentó de tamaño en las últimas décadas, mientras que ninguno perdió tierra en general.