La cantidad de tanques occidentales prometidos a las FFAA ucranianas no será suficiente para una ofensiva a gran escala, comentó a Sputnik el corresponsal de zonas de guerra y coronel en reserva Guennadi Alejin. Desde Rusia señalaron que estos suministros occidentales agravan el conflicto y traen consecuencias negativas para la seguridad de Europa.
Leopard tanks
© AFP 2023 / Attila Kisbenedek
Incluso las tripulaciones de carros de combate de los militares más entrenados no serán necesariamente capaces de interactuar eficazmente con otras unidades en el campo de batalla, dijo Guennadi Alejin.

"Por último, las Fuerzas Armadas rusas disponen de buenos sistemas antitanque", aseveró.

Alejin también subrayó que Rusia tiene una ventaja innegable en tanques y destacó que en las zonas más importantes de la línea de contacto, los dirigentes rusos colocaron los vehículos más potentes. Considera además que el número de tanques que Occidente pretende enviar a Kiev es, en cualquier caso, insignificante frente a la potencia del equipamiento militar ruso.


¿Cómo combatir los tanques de la OTAN?

A su vez, Víctor Murajovski, uno de los principales expertos militares rusos y redactor jefe del periódico Arsenal Otéchestva (Arsenal de la Patria), considera que es probable que las Fuerzas Armadas decidan en su mayoría mantener los carros de combate Leopard 2 y Abrams en reserva operativa para utilizarlos como equipos de ataque ofensivo si de repente consiguen romper las defensas rusas.
"En estas condiciones, la prioridad en la destrucción de vehículos de la OTAN sigue siendo la aviación operativa-táctica y del Ejército, así como la artillería y los grupos móviles antitanque. Los principales medios para destruir los Abrams y Leopard en el escenario anterior serán los misiles de aviación Vijr, Ataka e Izdelie 305 si se trata de aviones del Ejército, así como los misiles de aviación X-29 y los cartuchos de bomba única con ojivas antitanque, incluidas las autodirigidas, si se trata de aviones", explicó el analista.
A distancias superiores a 2.000 metros, agrega, tanto las municiones guiadas como los modernos sistemas de misiles antitanque autopropulsados y portátiles podrían ser el principal medio para contrarrestar a los vehículos de la OTAN.

En este contexto, el politólogo polaco Kristian Holaszczynski señala que los vehículos blindados transferidos por Occidente bastan a Ucrania para un trimestre de combates
"Cuando reunimos todo el equipo del que oímos hablar sobre su entrega, resultan ser unos 150-170 tanques, vehículos de combate. Sabemos que Ucrania ha perdido unos 550 vehículos de distintos tipos en esos 342 días, por lo que los 170 vehículos que están a punto de llegar probablemente bastarán para un trimestre", declaró.
El enfrentamiento en Ucrania, subrayó Holaszczynski, destruirá a cualquier equipo.

Un constante suministro de armas occidentales "es algo agravante"

Los suministros de tanques occidentales causarán otro agravamiento de la situación, pero no conducirá a una guerra mundial porque los soldados de la OTAN ya están luchando allí, señala a Sputnik el subdirector del Instituto de la Comunidad de Estados Independientes (CEI), Vladímir Zharijin.
"Por supuesto, es una cosa agravante. Es algo que acerca aún más al comienzo de una guerra mundial. Pero, sin embargo, no se trata de una situación única ni de algo súper novedoso", afirma.
Además, según algunos informes, los militares de la OTAN ya están presentes en Ucrania, prosigue el experto.
"Los sistemas Himars, los lanzamisiles inteligentes con misiles inteligentes están causando muchos problemas. El segundo son los sistemas de defensa antiaérea, estadounidenses y europeos. También creo que es probable que mantengan especialistas que se retiraron rápida e inesperadamente de los Ejércitos de sus respectivos países", subrayó.
En el contexto de la operación especial rusa en Ucrania, EEUU y la OTAN están respaldando al régimen de Kiev con decenas de miles de millones de dólares en armas. Moscú, en ese sentido, enfatizó repetidamente que la transferencia de armas occidentales solo prolonga el conflicto y que el transporte de armas se convierte en un objetivo legítimo para las Fuerzas Armadas rusas.