© Defa PressEl asesor del Líder de la Revolución Islámica de Irán para Asuntos Militares, el general de división Yahya Rahim Safavi.
Por todo, enfatizó la necesidad de redoblar la preparación del país persa para "salir del modo defensivo" y lanzar ataques en el marco de la guerra mediática y cognitiva contra el enemigo.
Conforme aseveró, "la guerra cognitiva es en realidad un tipo de guerra para controlar o cambiar la forma en que las personas reaccionan a la información recibida, y su objetivo es hacer colapsar al enemigo desde adentro e imponer la voluntad política sin una acción difícil".
Prosiguió que la guerra cognitiva no debe considerarse como uno de los campos de la guerra híbrida, "pues la guerra cognitiva es el principal complementario de la guerra híbrida".
Irán denuncia haber sido en los últimos meses objetivo de una guerra híbrida — una combinación de guerra mediática, política, y económica, etc. — , arraigada en el apoyo de algunos países europeos, además de Estados Unidos y el régimen de ocupación de Israel, a los disturbios en el país.
A pesar de los continuos esfuerzos, todos apuntados contra la unidad del pueblo iraní, tanto en los últimos años, como desde el inicio de los disturbios en septiembre de 2022, millones de personas en diversas ciudades de Irán salieron el 11 de febrero a las calles para conmemorar el 44.º aniversario del triunfo de la Revolución Islámica.
El Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, alabó a la nación iraní por crear otra epopeya más con su multitudinaria participación en las referidas marchas, "pese a todas las propagandas negativas".
Dijo que los adversarios de la nación, con Estados Unidos y el régimen sionista a la cabeza, a través de su imperio mediático intentaron hacer que la voz de los disidentes prevaleciera a la de los simpatizantes de la Revolución. "Sin embargo, la voz del pueblo prevaleció ante cualquier otra voz", destacó.
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