Más allá del enfático llanto de Occidente por la adhesión de Crimea a la Federación Rusa,
lo verdaderamente interesante sería saber si se trata de un fenómeno aislado o si estamos ante el inicio de una tendencia más generalizada de Europa oriental a inclinarse hacia Moscú. Al no tener otra cosa que ofrecer, aparte de la ya harto conocida sumisión a la burocracia de Bruselas, la Unión Europea teme que sus actuales clientes puedan sentirse atraídos por la libertad y las posibilidades financieras de Moscú.© DesconocidoEscena de júbilo popular en Simferopol por la adhesión de Crimea a la Federación Rusa.
Los occidentales siguen lanzando alaridos de denuncia contra la «
anexión militar» de Crimea por parte de Rusia. Sostienen que Moscú, en un regreso a la «doctrina Brezhnev», amenaza la soberanía de todos los Estados que fueron miembros de la desaparecida Unión Soviética o del también desaparecido Pacto de Varsovia y que se prepara para invadirlos, al estilo de lo sucedido en Hungría - en 1956 - y en Checoslovaquia - en 1968.
¿Es eso cierto? Es evidente que ni los propios occidentales están convencidos de la inminencia del peligro. A pesar de estar desplegando una retórica que asimila la «anexión» de Crimea por parte de Vladimir Putin a la de los Sudetes por Hitler, nada indica que de verdad piensen que el mundo se dirige hacia una Tercera Guerra Mundial.
Comentario: Para enterarse de su promesa, vea también: Putin sonríe: "Yo no tengo cuenta en el banco sancionado por EE.UU. pero la voy abrir"