cólera en Cuba
© Carl Juste / The Miami HeraldUna doctora cubana atiende enfermos en un centro asistencial en Haití, en enero del 2011.
El primer brote de cólera en Cuba en un siglo o más ha dejado un saldo de por lo menos 15 muertos y cientos de personas ingresadas en hospitales prácticamente clausurados por agentes de seguridad decididos a controlar la información, según reportes recibidos el viernes.

"Hay más de mil y pico de casos" en la provincia oriental de Granma, afirmó Yoandris Montoya, quien reside en Bayamo, la capital provincial. Agentes de la Seguridad del Estado han bloqueado el hospital de la ciudad, añadió, pero empleados del mismo le dijeron que las condiciones adentro son "caóticas".

Santiago Márquez, médico de la vecina ciudad de Manzanillo, agregó que hay "mucho pánico" en la región debido a la falta de información sobre la enfermedad y su propagación.

El Ministerio de Salud Pública de Cuba, el cual rara vez da a conocer información que pudiera brindar una imagen negativa de la isla, declaró el martes que había "controlado" un brote de cólera que había matado a tres personas y afectado a otras 50 en Granma.

Pero reportes no oficiales de la región recibidos el viernes indicaron que la enfermedad continuaba propagándose, con cientos de posibles casos atestando los hospitales en Manzanillo y Bayamo. Montoya aseguró que también se habían reportado casos en los poblados cercanos de Niquero y Pilón.

Hasta el viernes, el brote había matado por lo menos a 15 personas y afectado a otras cientos, escribió el periodista independiente de La Habana Calixto R. Martínez en un reportaje para el blog miamense Café Fuerte.

El cólera estaba reportado como una enfermedad erradicada en Cuba a fines del siglo XIX o principios del XX. Pero ha matado a más de 7,400 personas y ha afectado a más de 574,000 en Haití, justo al este de la isla. Decenas de miembros de brigadas médicas cubanas trabajan en esa nación.

El antes muy elogiado sistema de salud pública de Cuba ha decaído significativamente desde el fin de los enormes subsidios de Moscú a principios de la década de 1990. En enero del presente año, durante un período de 24 horas, tres vuelos de Cuba a Toronto llegaron con grupos de pasajeros que sufrían de náuseas, vómitos y fiebre.

La activista de derechos humanos de Manzanillo Tania de la Torre, esposa de Márquez, dijo que los residentes estaban hirviendo el agua pero que no podían lavarse las manos tanto como quisieran porque la ciudad, de unos 130,000, sufre una aguda escasez de jabón.

Las llamadas telefónicas de El Nuevo Herald al Hospital Celia Sánchez Manduley, en Manzanillo, la principal institución de salud en la región, fueron contestadas por mujeres que dijeron no estar autorizadas a hacer declaraciones y que posteriormente colgaron.

Martínez aseguró a El Nuevo que había conseguido su información de residentes y trabajadores de la salud en la región. Algunos de ellos lo llamaron desde teléfonos públicos porque la policía y los agentes de la Seguridad del Estado están tratando de impedir los reportes sobre el brote de cólera, añadió.

Un hombre de Manzanillo llamado Enrique Piñeiro le dijo que la cifra de muertes pasaba de 16, indicó Martínez, miembro de la agencia noticiosa independiente Hablemos Press. Otro hombre, quien afirmó que un familiar suyo trabajaba en el hospital regional, comentó que la cifra de muertes era de 15, agregó.