Mil gatos tuvieron la suerte de ser rescatados por voluntarios en su camino a la provincia de Guangdong a principios de esta semana, donde iban a ser sacrificados y vendidos como carne a restaurantes.

El camión que transportaba los gatos se accidentó en la ciudad de Changsha, y el conductor fue llevado al hospital. Los gatos se quedaron solos hacinados en jaulas cerradas durante casi 24 horas sin comida ni agua, hasta que llegó ayuda.

Los voluntarios locales se apresuraron a ayudar a los gatos hambrientos a la mañana siguiente, después que la policía y otros pidieron ayuda en Sina Weibo (el Twitter chino) para rescatar a los animales.

Cuidaron los gatos y les dieron alimentos, agua y leche. Más tarde los trasladaron a la Asociación Protectora de Pequeños Animales de Changsha para recibir cuidado adicional. Los voluntarios también adoptaron algunos gatos.

Los defensores de animales protestan por la práctica de vender carne de gato a los restaurantes. Sin embargo, la práctica continúa, ya que no existen normas que prohíben esta práctica.

Cada gato se vende de 1 a 2 dólares, y se estima que cada año en China se consumen como carne cerca de cuatro millones de gatos.