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Niños, estas inocentes criaturas, no tienen la seguridad en un territorio llamado Afganistán, donde la muerte y el derramamiento de sangre en las calles es algo normal en su vida cotidiana. La explosión de dos bombas por separado en dos diferentes puntos de Afganistán provocó el miércoles la muerte de al menos tres niños.

El primer ataque con bomba ocurrió fuera de una escuela en la provincia occidental de Farah, donde dos niños perdieron la vida y tres más resultaron heridos, según el portavoz del gobernador de la provincia, Abdol Rahman Zhawandai.

Por otra parte, Farid Ayal, el vocero policial de la provincia sureña de Uruzgan, informó que otro adolescente murió el miércoles, pues golpeó una bomba colocada al margen de la carretera cerca de su casa cuando andaba en bicicleta.

Hasta el momento ningún grupo o individuo se ha atribuido la responsabilidad de estas dos tragedias, pero los ataques con bomba es normalmente obra del grupo Taliban, que apunta principalmente las fuerzas afganas y extranjeras, pero los civiles tampoco son inmunes.

Ya ha pasado más de una década de la presencia extranjera, liderada por Estados Unidos, pero el país centroasiático todavía sigue viviendo en una inseguridad cada vez más amplia. - See more at: http://www.hispantv.ir/detail.aspx?id=248464#sthash.KEcLjumU.dpuf