Los vecinos del barrio de La Turbera han denunciado este martes la aparición de nuevos socavones que achacan a las filtraciones de agua que padece esta zona de Torrelavega desde hace varios años, y sobre la que hay pendiente de ejecutar un proyecto para excavar zanjas más profundas con bombas de achique.
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© PalomequeEl nuevo socavón ha aparecido en el jardín de Epifanio Fernández, uno de los mayores afectados por las filtraciones
Los nuevos socavones han aparecido en el jardín de la vivienda de Epifanio Fernández, uno de los mayores afectados por las filtraciones de agua bajo las viviendas, y sus dimensiones son de casi un metro de diámetro por más de dos de profundidad.

Esta situación no es la primera vez que se produce, ya que a comienzos de mayo del pasado año se produjo un "soplao" similar en una zona ajardinada próxima a las viviendas, tras lo cual los vecinos del barrio urgieron la realización de controles sobre las filtraciones de agua y el inicio de las obras de drenaje.

En este ocasión, los afectados se han reunido se han reunido esta mañana con el concejal de Barrios de Torrelavega , Pedro García Carmona, para conocer el estado de tramitación del proyecto elaborado por la Universidad de Cantabria (UC) para acabar con las filtraciones, proyecto presentado hace más de un mes.

Este trabajo cuantifica en 200.000 euros la inversión necesaria para acabar con las filtraciones de agua y con los posibles "soplaos", para lo que es necesario excavar zanjas entibadas de drenaje a una profundidad de cuatro metros e instalar bombas de achique para prevenir posibles inundaciones en el futuro.

La ejecución de este proyecto está pendiente de que el Ayuntamiento de Torrelavega , la Delegación del Gobierno y las consejerías de Industria y Medio Ambiente alcance un acuerdo sobre que entidad debe financiar los trabajos.

El proyecto elaborado por la UC es consecuencia del informe del Instituto Geológico Minero de España (IGME) el pasado agosto, que concluyó el problema es ajeno al proceso de llenado de la mina de Reocín, sino que se debe a la circulación subsuperficial del agua, por lo que recomendaba completar las obras de drenaje realizadas.

Pese a ello, los vecinos afectados por las filtraciones han vuelto a denunciar hoy que el estado de sus casas "es cada vez peor" y que viven "con miedo de que se nos caigan y nos quedemos en la calle", a la vez que criticaban la tardanza de las administraciones en dar una solución al problema.

Según detallan, "las humedades, grietas, bichos y roturas de azulejos en las casas aumentan día tras día", además de denunciar que la toma de decisiones "está demasiado parada".