El Ayuntamiento de Santa Cruz ha encargado a la empresa Dragados que lleve a cabo el relleno y vallado del enorme socavón en un solar en La Gallega para evitar riesgos a los vecinos. En este terreno, situado en la calle Aguileña 12, se llevaron a cabo obras de desmonte hace ya siete años pero los trabajos se detuvieron en ese punto, lo que puede suponer un riesgo no solo para las viviendas colindantes, sino también para los vehículos y los vecinos.
socavón Canarias
© José Luis GonzálezGran hueco que dejó una obra inacabada en el solar del barrio del Distrito Suroeste

El alcalde de Santa Cruz de Tenerife, el nacionalista José Manuel Bermúdez, y el primer teniente de alcalde y edil de Urbanismo, el socialista José Ángel Martín, acudieron en la mañana de ayer al barrio para firmar el acta de replanteo de la obra y que la empresa pudiera iniciar los trabajos de manera inmediata. "Ya empezarán a traer todo el material pero el grueso de los trabajos comenzará a verse a partir del lunes", explicó Martín, quien añadió que las obras tendrán una duración de un mes y medio o dos.

En cuanto a los trabajos que va a ejecutar Dragados en este solar de La Gallega, "se comprobará el estado en el que se encuentran las viviendas adyacentes al terreno, se rellenará todo el solar, que incluye un talud en las proximidades de las viviendas para asegurarlas, se arreglarán los desperfectos ocasionados como la rotura del canal y se levantará un muro", aseguró Bermúdez, quien confió en que todas estas actuaciones permitan a los residentes de la calle Aguileña vivir con más tranquilidad.

"Durante las últimas lluvias estuve aquí con los vecinos y la verdad es que se trata de una actuación necesaria", comentó el alcalde de la capital tinerfeña, quien añadió que una parte del antiguo Canal de Araya que discurre junto a la finca que se derrumbó tras un temporal por la ausencia de terreno sobre el que asentarse.

"Hemos pasado mucho miedo", aseguraron dos de las vecinas que residen en la calle Aguileña, María de los Ángeles Martín y María del Pilar Rodríguez. "Cuando llueve o hace viento parece que la casa se va a venir abajo", afirmó Martín.

Por su parte, Rodríguez relató que también han tenido problemas con los mosquitos y las ratas. "Las casas están asentadas sobre un terreno volcánico y al hacer el desmonte quedó una especie de cueva y a esto hay que sumar los mosquitos que se concentran en la charca que se forma cuando llueve", explicó este vecina. De la misma manera, estas vecinas afirmaron que desde que se llevaron a cabo las obras de desmonte en este solar, no dejan que los niños jueguen en la calle por miedo a que puedan tener un accidente.

Por todos estos motivos, tanto Bermúdez como Martín mostraron su satisfacción por el inicio de los trabajos y remarcaron que "ha sido una obra muy esperada por los vecinos pero al tratarse de un solar privado, teníamos que agotar todas las vías antes de poder encargar nosotros los trabajos".

Esta es la segunda obra en importancia que ejecuta de manera subsidiaria el Ayuntamiento de Santa Cruz desde que la Gerencia de Urbanismo cuenta con todas las herramientas necesarias para poder llevar a cabo los trabajos y, de manera posterior, pasarle la factura a los propietarios.

"Urbanismo no puede quedarse con las manos cruzadas en este tipo de problemas, que pueden acabar afectando a varios vecinos", manifestó el primer teniente de alcalde en Santa Cruz, quien explicó que fue en 2012 cuando se activaron las ejecuciones subsidiaras en la capital tinerfeña. "Hasta ahora hemos llevado a cabo el arreglo de un muro en la calle Guanche Zebenzui, en el barrio de La Salud, ahora realizaremos este pero le seguirán la retirada de una valla y el tapiado de un inmueble en la calle San Sebastián y la demolición de la antigua fábrica de Celgán", manifestó José Ángel Martín para añadir que se ambas podrían comenzar en estos meses de verano.

El alcalde de Santa Cruz aprovechó la ocasión para hacer un llamamiento a todos los propietarios para que sean responsables. "Llamo la atención a todos los vecinos no solo del distrito suroeste, sino de toda la ciudad para que sean responsables y terminen sus obras, las dejen aseguradas y valladas para que no sean peligrosas para las personas que viven a su alrededor porque es su obligación hacerlo", dijo Bermúdez, quien comentó que el Ayuntamiento no posee recursos para asumir todas las obras del municipio".