Estados Unidos ha acelerado el despliegue de una versión más precisa de su principal armamento nuclear en las bases europeas de la OTAN, de acuerdo con un cable diplomático norteamericano y dos personas vinculadas al hecho citadas por el medio 'Politico'.
US Bomber
© AFP 2022 / AFP
Se tenía agendado para la primavera de 2023 el arribo a territorio europeo de una bomba de caída libre B61-12 renovada, sin embargo los planes cambiaron para lograr el traslado este diciembre, reveló Washington a sus aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) durante una reunión a puerta cerrada en Bruselas, capital de la Unión Europea, de acuerdo con el cable.

La maniobra también contempla la sustitución de viejas armas por versiones actualizadas en varias instalaciones de almacenamiento en Europa para su potencial uso por jets de combate y aviones bombarderos tanto estadounidenses como de sus aliados, en un momento de tensión en Occidente ante el conflicto entre Rusia y Ucrania.

Politico estimó que hay una creciente preocupación en el mundo occidental para evitar el uso de armas nucleares de Moscú contra Kiev.

Las actualizaciones del programa B61 han sido abiertamente discutidas en documentos de presupuesto y pronunciamientos públicos durante años, además de que oficiales del Departamento de Defensa estadounidense han declarado que las mejoras son necesarias para garantizar la modernización y seguridad de las reservas.

Un vocero del Pentágono, el brigadier general Patrick Ryder, reconoció la modernización del arsenal nuclear estadounidense en suelo europeo, pero aseveró que es una adecuación que se ha procurado durante años y no está relacionada a la situación actual en Ucrania, además de que no ha sido acelerada en ningún sentido.

Analistas consideraron que el ajuste temporal para el arribo del armamento podría avivar una situación ya de por sí peligrosa en Europa. Además, el anuncio en la reunión de Bruselas se dio días después de que la OTAN diera banderazo a su ejercicio nuclear anual, conocido como Steadfast Noon y en el que se involucran alrededor de 70 aeronaves.

En paralelo, Rusia desarrolló un ejercicio nuclear descrito por el país euroasiático como el simulacro de un golpe nuclear masivo en represalia por un ataque nuclear en su contra.

El director del proyecto de información nuclear de la Federación de Científicos Estadounidenses, Hans Kristensen, consideró que sería raro acelerar la renovación del arsenal estadounidense en Europa, pues las autoridades occidentales han dicho que no responderán a la situación con armas nucleares.

En cambio, el activista por el desarme Tom Collina perfiló que el mensaje detrás del envío de armas nucleares en diciembre podría más bien estar dirigido a los aliados europeos de Washington, que se sienten especialmente vulnerables ante Moscú.

"Ya hay (viejas) B61 ahí, los rusos lo saben, funcionan bien. Las nuevas serán más actuales, pero no es realmente una gran diferencia, sin embargo puede ser una manera de fortalecer a los aliados en un momento en que se sienten particularmente amenazados por Rusia", expuso.

Al menos 15 países miembros de la OTAN afirmaron en Bruselas que la alianza no debe permitirse entrar en un chantaje nuclear conducido por el presidente de Rusia, Vladímir Putin.

Collina advirtió que cualquier movimiento relacionado con el armamento nuclear, por modesto que sea, podría tener consecuencias incalculadas e ir empeorando.

Las bombas B61

La categoría B61 designa una familia de bombas nucleares inicialmente desarrolladas al principio de la década de 1960 y que han sido probadas en espacios subterráneos del estado de Nevada, en EEUU. Desde entonces se ha desarrollado una docena de versiones a lo largo de las décadas, varias de ellas ya retiradas.

El Departamento de Energía del Gobierno de Estados Unidos conduce el programa de extensión de la vida de las bombas B61, con un presupuesto de 10.000 millones de dólares, que consiste en la sustitución de varias versiones anteriores del arsenal, incluidas 100 unidades alojadas en bases aéreas alemanas, italianas, belgas, holandesas y turcas.

Las nuevas versiones permiten a diferentes tipos de aeronaves de combate transportar la bomba, además de que la Fuerza Aérea estadounidense ya ha hecho vuelos de prueba con el nuevo diseño.

El titular del Pentágono, Lloyd Austin, declaró ante sus aliados de la OTAN que la postura nuclear de Estados Unidos mantendrá su política de ambigüedad calculada, en contrasentido a la promesa en campaña electoral del actual presidente Joe Biden en el sentido de que Washington cambiaría su estatus al uso único de armas nucleares para detener un ataque con ese tipo de armas contra la nación norteamericana y sus aliados.

Los aliados de Estados Unidos en Europa han hecho un gran trabajo de convencimiento para que Biden no modificara la política nuclear de su país, compartió el codirector del programa de política nuclear del Fondo Carnegie para la Paz Internacional, James Acton.