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Chinese People's Liberation Army (PLA) transferring a missile
© Liu Mingsong/XinhuaEsta foto tomada el 7 de abril de 2023 muestra a la fuerza de cohetes del Mando del Teatro Oriental del Ejército Popular de Liberación (EPL) chino transfiriendo un misil antes de la patrulla de preparación para el combate y los ejercicios militares alrededor de la isla de Taiwán.
El presidente dijo a las tropas en una base naval que su misión es defender la "soberanía territorial" del país.

El presidente Xi Jinping ha instado al ejército chino a prepararse para el combate real, según informaron el miércoles los medios de comunicación nacionales. Las declaraciones se produjeron días después de que Pekín realizara simulacros militares masivos en torno a Taiwán que, al parecer, incluyeron la simulación de ataques de precisión contra la isla autónoma.

Dirigiéndose al personal militar en una base naval del sur de China el martes, Xi pidió que se reforzara la "formación militar orientada al combate real", según citó el canal estatal CCTV.

Al parecer, el dirigente chino ha señalado la defensa de la "soberanía territorial y los intereses marítimos" de Pekín, así como la protección de la "estabilidad periférica general", como la misión principal de la armada.

El sábado, China inició unas maniobras militares de tres días de duración con el nombre en clave de "Espada afilada unida" en las proximidades de Taiwán.

Según el ejército de Taipei, al día siguiente detectó nueve buques de guerra y unos 71 aviones de combate en la zona.

El coronel superior Shi Yi, portavoz del Mando del Teatro Oriental del Ejército Popular de Liberación chino (EPL), describió los buques y aviones como un "cerco" a la isla. Aclaró que los simulacros pretendían ser una advertencia "contra la connivencia entre las fuerzas separatistas que buscan la "independencia de Taiwán" y las fuerzas externas, y contra sus actividades provocadoras".

Las maniobras militares se produjeron tras la visita de la presidenta taiwanesa, Tsai Ing-wen, a Estados Unidos la semana pasada, en la que se reunió con el presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy.

Era la segunda vez que Tsai se reunía con un presidente de la Cámara de Representantes estadounidense en menos de un año. La visita de Nancy Pelosi, predecesora de McCarthy, a Taiwán en agosto enfureció a Pekín, que respondió con las mayores maniobras de su historia en el estrecho de Taiwán.

Taiwán es independiente de facto desde 1949, cuando el bando perdedor de la guerra civil china huyó a la isla y estableció su propia administración. Aunque sólo unos pocos países han reconocido a Taiwán como Estado soberano, Estados Unidos mantiene desde hace tiempo estrechos lazos no oficiales con Taipei, tanto militares como económicos. Formalmente, Washington sigue adhiriéndose al principio de "una sola China".

Pekín considera que la isla es una parte inalienable de su territorio que ha sido tomada por los separatistas, y acusa a Estados Unidos de inmiscuirse en sus asuntos internos y alentar a los políticos "secesionistas".

Aunque los dirigentes chinos afirman que dan prioridad a una "reunificación" pacífica, no han descartado opciones militares.