Los peces extraídos son enterrados en un predio que fungía como banco de material para evitar contaminación.
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© Víctor Hugo OrnelasEl Ayuntamiento de Tlajomulco realizó las últimas labores para retirar los peces muertos de la laguna de Cajititlán.
La mañana de este lunes personal del ayuntamiento de Tlajomulco realizó las últimas labores para retirar el remanente de peces muertos que desde el pasado 16 de junio fueron localizados en la laguna de Cajititlán, aunque no descartan que se repita el evento.

La cantidad de peces muertos que han sido extraídos del vaso lacustre supera las ocho toneladas y aunque esto ha generado una denuncia penal por parte de la Secretaria de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (SEMADET), el municipio asegura que los peces no murieron por contaminación y la dependencia estatal lo sabe.

El alcalde Ismael del Toro señaló que políticamente se trata de un tema "muy rentable" y es por ello que ahora se presenta el tema de la denuncia y supuesta contaminación, "Lo dice (Magdalena Ruiz) la secretaria de medio ambiente (que se trata de un fenómeno cíclico) luego la regañan y la mandan a hacer política".

A la par presentó los más recientes estudios sobre la calidad del agua, el documento con fecha del 30 de mayo y firmado por la empresa Apoyo Técnico Industrial, indica que los niveles de contaminación como lo son coliformes totales y los niveles de saturación de oxigeno se encuentran dentro de lo permisible por las normas mexicanas.

Sobre la disposición final de los peces que han sido extraídos de la laguna de Cajititlán, pertenecientes a la especia conocida como popocha o pintita, han sido trasladados a un predio conocido como El Gato en dónde se encuentra un antiguo banco de material.

"Por las características del lugar determinamos que es idóneo para nuestro propósito que es no afectar el ambiente, aquí aseguramos que no se contaminan mantos freáticos", explicó Carlos Bernal, titular de medio ambiente y ecología en Tlajomulco, mismo que explicó que se respeta la legislación federal en materia del medio ambiente.

De manera oficial, el municipio reconoce la extracción de 6.5 toneladas de peces muertos, aunque no son ellos los únicos que se han dado a la tarea de limpiar la laguna, a la labor se han sumado por iniciativa propia pescadores y propietarios de predios colindantes con el vaso lacustre, quienes generalmente utilizan el pescado extraído para alimentar al ganado o como fertilizante en sus tierras.