El Congreso estadounidense votó el miércoles, 6 de diciembre, poner fin a los intentos por parte de algunos miembros del partido Demócrata de destituir a Trump.

Un total de 58 demócratas votaron para proseguir con los artículos presentados por el congresista Al Green, demócrata de Texas, que permitirían llevar a cabo un juicio político. Otros cuatro se abstuvieron.
Donald Trump
© Seth Wenig / AP

En su resolución, Green dijo que la "asociación" de Trump con el nacionalismo blanco, neonazismo y su incitación al odio y su hostilidad eran prueba de que no estaba preparado para ocupar el Despacho Oval. La resolución no hizo ninguna referencia a la investigación sobre Rusia.


Comentario: Es decir, lo quieren juzgar por ser un cretino, algo innegable, pero que no representa una razón legal suficiente para juzgar a alguien.


"Tolero poco el fanatismo", dijo Green en una entrevista después de la votación. "No creo que la obstrucción a la justicia sea más importante en este país que el racismo, la xenofobia, el odio y la mala conducta que está emanando de la Casa Blanca. Creo que hemos dejado de lado durante mucho tiempo el odio".


Comentario: No, la verdad es que el odio está más vivo que nunca en EEUU. La mayoría de los representantes públicos en el país odian todo lo que Rusia representa, por ejemplo.


En la resolución, el congresista hizo referencias específicas a una serie de comportamientos de Trump: sus comentarios después de los brutales acontecimientos en Charlottesville, cuando el presidente equiparó a los manifestantes progresistas con los manifestantes neonazis; su decisión la semana pasada de compartir tres vídeos anti-musulmanes publicados por un grupo de extrema derecha británico; y una lista de declaraciones que ha hecho denigrando a grupos y a personas individuales, incluyendo a jugadores de la NFL y a la congresista Frederica Wilson.

"Pareció algo surrealista" dijo Wilson, que votó a favor de la resolución, en relación a ser mencionada expresamente.

Green se tomó el paso atrás positivamente, llamándolo un "paso" en un largo y prolongado proceso. El congresista dijo que ya estaba redactando borradores de más artículos para la destitución pero que todavía no había tomado una decisión sobre cuándo los presentaría.

El demócrata de Texas afirmó que estaba agradecido a sus compañeros que votaron en contra de la moción y a favor de sacar adelante la resolución.

Green aseguró que estaba sorprendido por el número de demócratas que la apoyaron. "No tenía indicios de que tantos demócratas iban a votar a favor de ella", dijo Green.

DISTINTAS POSTURAS DENTRO DEL PARTIDO DEMÓCRATA

Los líderes demócratas llevan meses intentando calmar las llamadas a destituir a Trump, defendiendo que la decisión es demasiado prematura teniendo en cuenta las investigaciones en curso relacionadas con su campaña y con su administración, llevadas a cabo por comisiones del Congreso y por el consejero especial Robert Mueller.

En un comunicado antes de la votación, la líder demócrata del congreso, Nancy Pelosi, y el jefe del grupo, Steny Hoyer, defendieron esa postura.
"Este presidente ha hecho declaraciones y ha tomado decisiones que son más que tristes para la mayoría de los americanos, defendiendo a aquellos que abrazan el odio y la división al mismo tiempo que fomenta políticas que dañarán nuestra economía y pondrán en peligro nuestra seguridad nacional", dijeron los demócratas
"Se han planteado cuestiones legítimas sobre su adecuación para liderar esta nación. Ahora mismo, las comisiones congresistas siguen estando muy comprometidas con las investigaciones sobre el comportamiento del presidente tanto antes como después de su investidura. El consejo especial de investigación está avanzando también y se debería permitir que prosigan las consultas".


Comentario: Aquí es importante aclarar que para los congresistas demócratas, y una gran parte de los republicanos, la adecuación de una persona para liderar EEUU es directamente proporcional a su capacidad de callarse y cumplir con las 'órdenes' que todos sabemos que han tenido que cumplir todos los presidentes de Estados Unidos. Por tanto, el hecho de que un presidente sea o no adecuado para su puesto, dependerá de cuánto riesgo exista para el incumplimiento de esas 'órdenes'.


"Ahora no es el momento de considerar artículos de destitución".

MÁS PETICIONES EN EL FUTURO

Sin embargo, el número tres del partido Demócrata en el congreso, Jim Clyburn de Carolina del Sur, votó a favor de llevar adelante el proceso de destitución, así como otras figuras destacadas como Keith Ellison, el vicepresidente del Comité Nacional Demócrata.

Wilson contó a The Guardian que una resolución de destitución que mencione a Rusia y otros problemas legales de Trump tendría más apoyo en el futuro.


Comentario: Esto es lo que podemos esperar de una presidencia de Donald Trump, presión constante por parte del Estado Profundo para mantenerlo obediente.


La Constitución de Estados Unidos determina que "el presidente, el vicepresidente y todas las autoridades civiles de Estados Unidos pueden ser destituidos de su cargo por, o si son sentenciados por, traición, soborno u otros crímenes mayores y menores".

Para someter a Trump a un juicio político se requiere una votación por mayoría simple en el Congreso y después el Senado hace de jurado en el caso y se precisa del voto a favor de dos tercios para ser destituido.

Sólo dos presidentes han sido sometidos a juicios políticos para su destitución: Andrew Johnson y Bill Clinton. Sin embargo, ninguno de los dos fue sentenciado por el Senado. Richard Nixon dimitió antes de que la Cámara de Representantes pudiese votar la resolución para que fuese a juicio político para su destitución. En la historia de Estados Unidos 18 autoridades han sido sometidas a juicio político y sólo ocho han sido sentenciadas.