(España) - Vivimos en una época en la que, si las masas piensan como piensan, raramente es por iniciativa propia. Estamos asistiendo a una gigantesca farsa.
rajoy puigdemont
Hoy vamos a repasar el artículo que Lluís Bassets ha publicado en El País bajo el título "Correlación de Fuerzas". Habla Bassets de la Cataluña polarizada o "las dos Cataluñas", las cuales a primera vista defienden posturas antagónicas e irreconciliables:
"El estancamiento del independentismo y el correlato de consolidación de un bloque radicalmente enemigo significa el inicio de una nueva etapa en la que ya no se producirán incrementos notables ni desplazamientos en la opinión. Cataluña está profundamente dividida. En bloques se diría que perfectamente estancos. Hay una Cataluña que se siente ofendida por los porrazos del 1-0, los presos y la ausencia de Puigdemont, al igual que hay una Cataluña que no perdona las leyes antiestatutarias y anticonstitucionales del 6 y 8 de septiembre, que significaron la desposesión de sus derechos políticos para aquellos catalanes disconformes con la ruptura unilateral con el marco legal."
Lo curioso es que Bassets habla como si esas 2 Cataluñas se hubiesen formado de manera espontánea, cuando él mismo sabe que no es así. Vivimos en una época en la que, si las masas piensan como piensan, raramente es por iniciativa propia.

De ahí llegamos a la conclusión de que hay 2 poderes, aparentemente enfrentados, que han invertido una gran cantidad de recursos y dinero para manipular a las masas y llegar hasta esta situación: la de la Cataluña dividida y enfrentada contra sí misma.

Pero si nos fijamos en las posiciones geopolíticas (que es LA POLÍTICA de verdad) que defiende cada bando, descubriremos que son idénticas, ya sea en Siria, Libia, Ucrania... Conclusión: el supuesto "enfrentamiento" entre ambos bandos es más aparente que real.

Es decir, estamos asistiendo a una gigantesca farsa. Ambos bandos están en guerra, pero no el uno contra el otro, sino que son los dos juntos (cada uno interpretando su papel) contra aquella población cuya opinión pretenden modificar. Ingeniería social de manual.


Han creado la tesis y luego la antítesis. Ahora toca crear la parte definitiva, sin la cual nada de lo anterior habría tenido sentido: la síntesis. Así explica Bassets cómo ha de generarse esa "tercera vía":
"La única posibilidad de un movimiento significativo en la célebre correlación de fuerzas interna vendría dada por la consolidación de un tercer bloque, la tercera Cataluña, capaz de imponer su ritmo y su agenda sobre las dos Cataluñas polarizadas que actualmente rigen en el escenario político. No hay que hacer muchos esfuerzos para intuir su programa: gobierno efectivo, defensa de los actuales niveles de autogobierno, reforma federal, compromiso con la Constitución y en el horizonte la resolución más civilizada posible al problema de los delitos y de las penas."
Han conseguido llevar la situación hasta un punto del bloqueo permanente, donde es imposible formar gobierno, y en el que desde todos los bandos (incluso desde el exterior) empieza a oírse con creciente insistencia el mantra de que "hay que buscar una solución dialogada".

Ahora ha llegado el momento de crear la síntesis, el "bloque del consenso" que se encargará de desbloquear esta situación, que propondrá la tan cacareada Reforma Constitucional Federal como respuesta a un problema cuya solución estaba escrita de antemano.


Ahí es cuando empezarán a trabajar los portavoces de @societatcc, casi todos ellos reclutados de entre las filas de @EsquerraFederal, para convencer a la Cataluña "españolista" que sólo el Federalismo puede desencallar está situación y salvarles del secesionismo.

Así es cómo el llamado "conflicto catalán" llegará a su fin: cuando sean las masas de Cataluña y de España quienes exigan a sus gobernantes realizar los cambios constitucionales y reformas territoriales que esos mismos gobernantes querían ser obligados desde el principio.

Andrei Kononov (@andrei_kononov) es co-fundador y coordinador del Colectivo Utopía