Las labores de búsqueda de víctimas y desaparecidos en las zonas devastadas tras varios días de incendios en Grecia continuaron ayer, mientras que a esta catástrofe se le suman ahora inundaciones en los suburbios del norte de Atenas. Bomberos, autoridades y vecinos no tienen descanso pues tan solo unas horas después de dar por controlados los incendios que asolaron la región ateniense del Ática, las calles de varios municipios se han convertido en torrentes, inundadas por una tromba de agua que ha dejado a muchos vecinos atrapados en sus hogares o automóviles.
Flash flood hits northern Athens suburb
Imagen de los destrozos que han dejado a su paso las inundaciones en Atenas.
En pocas horas se recibieron más de 140 llamadas para solicitar asistencia a los bomberos, principalmente en los municipios de Marusi y Kifissia. La cifra oficial de muertos por los incendios se elevó ayer a 83, tras el fallecimiento de dos heridos. Según los medios locales, las fuerzas de rescate hallaron por la tarde dos cadáveres más en la localidad costera de Mati, epicentro de la catástrofe donde se han registrado la totalidad de las víctimas mortales, aunque las autoridades no han confirmado todavía este hallazgo.


Las cifras de fallecidos podrían seguir aumentando pues el número de desaparecidos continúa siendo incierto, aunque se cree que algunos de ellos podrían haber regresado a sus hogares sin avisar a las autoridades y, además, en las listas están también los cadáveres que aún no han sido identificados.

Mientras continuaba ayer el registro de las casas en las zonas afectadas y más de 300 centenares de bomberos, miembros de los equipos de rescate y voluntarios examinan una a una las viviendas arrasadas por el fuego en busca de víctimas.

El ministro de Defensa griego, Panos Kammenos, acudió ayer a la zona para supervisar la labor de las Fuerzas Armadas, lo que resultó en un encontronazo con algunos afectados por la gestión gubernamental de la crisis.

Kammenos prometió que el Ministerio de Defensa contribuirá a la completa reconstrucción del área y destacó que se abrirán caminos hacia el mar. La ausencia de un plan de urbanismo en la zona se ha barajado como una de las principales causas de la alta mortandad de esta tragedia.

Además, equipos militares y de protección civil retiraron escombros y árboles caídos en las áreas afectadas por el fuego para evitar que la lluvia que caía ayer sobre el terreno quemado provocase inundaciones también en el epicentro del fuego. Los vecinos colaboran directamente buscando a sus amigos o familiares o, indirectamente, colocando carteles en sus puertas avisando de que están vivos para ahorrar tiempo y esfuerzo a los equipos de rescate.

Historia de una tragedia

Con los días más y más historias de desaparecidos van aclarándose, como la de una pareja de recién casados irlandeses que pasaban su luna de miel en Grecia cuando fueron sorprendidos por el incendio en Mati, donde se registraron todas las víctimas mortales.

Al verse rodeados por las llamas cada uno corrió en una dirección diferente por lo que la mujer, hospitalizada con quemaduras pero fuera de peligro, perdió de vista a su marido al que dieron por desaparecido y cuyo fallecimiento se confirmó ayer.

Muchas otras incógnitas permanecen aún abiertas, como las de una mujer y su nieto de trece años que han sido vistos en imágenes en televisión en una de las playas donde se refugiaron muchos de los supervivientes pero que de momento no han sido encontrados.

¿Fortuitos o provocados?

La gran pregunta es qué ha causado los incendios más mortíferos registrados en Europa en este siglo, aunque ya hay hipótesis que señalan fallos en la red eléctrica. El alcalde de Penteli, Dimitris Steryiu, en la periferia de Atenas y cerca de la zona donde se registraron todas las víctimas mortales, atribuyó ayer el fuego a un tendido eléctrico caído al sol.

El ministro de Orden Público griego, Nikos Toskas, sin embargo, aseguró que se han encontrado "indicios de actos criminales" en dos de los graves incendios que asolaron la región ateniense del Ática. "Hay serios indicios de una mano criminal pero las investigaciones están en curso", explicó Toskas, que también añadió que se ha producido un "hallazgo sospechoso" en Mati, el lugar donde se registraron la totalidad de fallecimientos.

Allí los fuertes vientos provocaron una "situación extraordinaria" pues dos focos arrasaron la población en tan solo hora y media, según señalaron ayer en rueda de prensa Toskas, el portavoz del gobierno Dimitris Tzanakopulos, el jefe de la Policía griega, Konstantinos Tsuvalas, y el jefe del servicio de Bomberos, Sotirios Terzudis.

Tzanakopulos resaltó que la investigación se ha realizado con la ayuda de imágenes vía satélite, solicitadas a la NASA, el Programa de Observación Espacial de la Unión Europea y otras entidades internacionales a petición del primer ministro griego, Alexis Tsipras. Estas imágenes mostraron cómo no solo el incendio de Mati, sino también el de Kineta, en una zona forestal al oeste de Atenas, fueron muy probablemente provocados. Allí se registraron en menos de media hora trece focos distintos, todos alineados en paralelo a la carretera, según demuestran las fotos y vídeos de los satélites.

Por otra parte, la gestión por parte de la dirección de los bomberos y la protección civil también ha recibido críticas, pues se dice que aunque se sabía con antelación que había un alto riesgo de incendios forestales en la zona, no se trajeron refuerzos suficientes para gestionar los focos simultáneos que se declararon el pasado lunes.

Ola de calor en Europa

Londres. El Reino Unido podría batir hoy su récord de calor, con una previsión superior a los históricos 38,5 grados centígrados alcanzados en 2003, informó ayer la Oficina Meteorológica británica (Met Office). Los pronósticos apuntan que en el sur, este y centro de Inglaterra las temperaturas superarán en los próximos días los 37 grados, pero la Met Office apuntó a que si "las condiciones se unen" se podrían superar los 38,5 grados.

Bruselas. Bélgica vive un verano inusual de sequía y temperaturas que superan los 35 grados, lo que ha motivado ya cortes de agua, una peligrosa concentración de partículas de ozono y el disparo de las ventas de aires acondicionados, un elemento poco habitual en las casas del país.