La celebración de estas audiencias siempre ha sido una parte crucial de la estrategia de la Resistencia. Como ha demostrado la historia, una y otra vez, cuando los que son literalmente fascistas se apoderan de su democracia, proscriben a los partidos políticos opuestos y comienzan a enviar a la gente a los campos de concentración y a revocar el acceso de los periodistas a la Casa Blanca, la única manera efectiva de derrotarlos es formar una gran cantidad de comités del Congreso e investigar el Hitler que llevan dentro. Este es especialmente el caso cuando los que son literalmente fascistas, y que se han apoderado de su democracia, están conspirando con un dictador eslavo de ojos sospechosos, cuyo país ustedes básicamente han rodeado con sus fuerzas militares de dominación de espectro completo, y a quien sus medios de comunicación han demonizado completamente; pero que sin embargo es capaz de lavar el cerebro a sus ciudadanos para que elijan a su presidente fascista títere con unos cuantos miles de dólares en anuncios de Facebook.
Una vez que se ha determinado que ha sucedido (y obviamente sí ha sucedido), es necesario quitarse los guantes. Basta de pavonearse con sombreros de concha, no mientras el Hitler ruso esté en el poder. No, en ese punto, realmente no tienen más remedio que esperar dos años hasta que su partido de oposición (que Hitler olvidó de alguna manera prohibir) recupere el control de la Cámara de Representantes (que Hitler olvidó de alguna manera disolver), esperar otros dos meses hasta que tomen posesión de su cargo, e inmediatamente empezar a emitir citaciones, auditar los registros financieros de Hitler, y tomar declaraciones juradas de ex prostitutas. Sé que eso puede sonar extremo, pero recuerden, estamos hablando de fascistas literales, respaldados por fascistas rusos literales, que andan por ahí envalentonando el fascismo literal y haciendo gestos con las manos literalmente fascistas en la televisión, ¡y haciendo todo tipo de otras cosas fascistas!
Ahora bien, si usted es como yo, probablemente se estará preguntando: Si Trump es realmente un fascista, por no mencionar un agente de la inteligencia rusa, ¿por qué la "Resistencia" no lo ha asesinado? Muchos de ellos son ex miembros de la CIA, después de todo, o son miembros de la Comunidad de Inteligencia. ¿Por qué molestarse con todas estas audiencias del Congreso? ¿Por qué no ir y matarlo?
Bueno, el problema con eso, aparentemente, es que tienen que seguir "el imperio de la ley", que les impide simplemente asesinar a la gente, y "cambiar de régimen" a los gobiernos que no están siguiendo la pauta y, ya saben, organizar golpes militares, armar y entrenar a escuadrones de la muerte sádicos y sancionar a miles de niños hasta que mueran. Ese tipo de cosas no sólo son malas desde el punto de vista moral, o lo que sea, sino que también son ilegales. Así que, aunque un agente ruso, que también es literalmente Adolfo Hitler, le robó la elección a Hillary Clinton y está convirtiendo a Estados Unidos en una dictadura fascista, el único recurso que tiene la "Resistencia" es montar estas investigaciones en el Congreso y publicarlas con un detalle insoportable hasta el 3 de noviembre de 2020, momento en el que toda esta histeria del "fascismo" desaparecerá en el éter como la histeria de la "Guerra contra el Terrorismo" lo hizo en el momento en el que Trump ganó la nominación.
Pero eso es dentro de dos años, lo que es casi una eternidad. ¡Mientras tanto, la "Resistencia" neoliberal tiene que hacer una investigación seria! Y no sólo la investigación de Mueller sobre las actividades traicioneras de Trump como agente ruso. No, estamos hablando de investigaciones congresionales de sus declaraciones de impuestos, sus estados de cuenta del Deutsche Bank, recibos de comida para llevar, boletos de tintorería, ¡toda su historia financiera fascista! ¡Y luego está eso de los emolumentos! ¡Y ese asunto de Kavanaugh! ¡Y eso de la autorización de seguridad! ¡Y esa tontería! ¡Y algunas otras cosas! Y, bueno, creo que es bastante seguro asumir que estamos en camino a Ciudad Citación.
Los medios de comunicación corporativos parecen estar de acuerdo. Escaneando la cobertura postelectoral, parecía que la mayoría de los periodistas de la "Resistencia" estaban en el comunicado de prensa oficial. The Guardian comenzó a aceptar apuestas en vivo sobre las investigaciones que la Cámara lanzaría primero. El New York Times, en sus continuos esfuerzos por proteger al Asesor Especial Robert Mueller del "amordazamiento" fascista al que su equipo editorial está seguro de que Trump está a punto de someterlo para evitar que presente evidencia de los años formativos de Trump en el GRU (y de los posibles vínculos con los asesinos de los Skripal), publicó una "hoja de ruta" que Mueller puede seguir para "enviar evidencias incriminatorias directamente al Congreso", ¡pasando por alto el Departamento de Justicia nazificado! Según la CNN (un samizdat disidente propiedad de la división Turner Broadcasting de Warner Media, LLC, que a su vez es propiedad de AT&T, un holding corporativo multinacional), "los demócratas de la Cámara de Representantes se preparan para liberar toda la fuerza de sus poderes de supervisión de la administración Trump" en una serie de "audiencias controladas por los demócratas de alto nivel", las que Jim Acosta cubrirá en vivo, ¡aunque tenga que sacar a todos los pasantes nazis dominados en la Colina del Capitolio para hacerlo! Podría seguir, pero ya se hace una idea. Y para cualquiera que no lo haga, aquí la presento...
Los próximos dos años serán una demostración del poder del imperio capitalista global y su máquina propagandística predominante, de la que el mundo nunca ha sido testigo. Para el 3 de noviembre de 2020, necesitarán haber lavado el cerebro de suficientes estadounidenses para que voten por cualquier títere capitalista global que los demócratas nominen para derrotar a Donald Trump en las elecciones generales, lo cual no será pan comido. Para hacer esto, necesitarán fomentar una atmósfera de histeria sin sentido, agotamiento emocional y paranoia, de tal manera que cualquiera que esté a la izquierda de Mussolini se tambalee hacia las urnas el día de las elecciones y vote por los demócratas sólo para que se detengan.
Además de las Audiencias Hitlergate, cuyos momentos insoportables serán transmitidos en vivo y luego exprimidos hasta la muerte por los expertos y analistas de los medios de comunicación corporativos; continuarán sometiéndonos a un torrente de mensajes diseñados para convencernos de que Donald Trump es a la vez Hitler y un operativo ruso, y de que Estados Unidos está literalmente "al borde del fascismo" y de que todo el mundo que cuestione esta narrativa es un fascista trumpista que adora a Putin, un delincuente lleno de odio, y, probablemente, un "terrorista doméstico".
Ninguno de estos mensajes tendrá que tener sentido. El objetivo de la "Resistencia" no es presentar un argumento creíble de que Donald Trump es literalmente un fascista o un operativo ruso, o de que el capitalismo global está en peligro real de ser despedazado por el fascismo literal (cualquiera que sea su definición de fascismo). El objetivo de la "Resistencia" es dejar inequívocamente claro quién dirige realmente las cosas, y qué pasa con los molestos payasos multimillonarios que son elegidos presidente sin su permiso, y con la chusma ignorante que elige a esos payasos idiotas, o que votan a favor de abandonar la Unión Europea (lo que, por supuesto, nunca permitirán que ocurra, excepto quizás en un sentido nominal).
En otras palabras, las clases dominantes capitalistas mundiales están a punto de darle una lección al mundo. Es la misma lección básica que le han estado enseñando al mundo desde la disolución de la Unión Soviética. La enseñaron en la antigua Yugoslavia. La enseñaron en Grecia, Irak y Libia. La han enseñado en todo el Medio Oriente. Están a punto de enseñarla en todo Occidente. La lección es que la resistencia al capitalismo global no es sólo inútil, es suicida. La lección es, jueguen con la política de identidad y todas esas "guerras culturales" que les satisfacen, pero si se meten con el capitalismo global, los aplastaremos como a un gusano de tomate.
Las Audiencias Hitlergate, la histeria del fascismo, la paranoia del control mental ruso y el resto de la campaña de propaganda concertada a la que hemos estado sometidos desde 2016 (y cuya fuerza real estamos por experimentar) son sólo parte de un esfuerzo más amplio, cuyo objetivo no es solamente aplastar la insurgencia "populista" que comenzó en Occidente con el referéndum del Brexit, continuó con Trump y luego se extendió por toda Europa, sino también aplastar toda esperanza de futuras rebeliones contra el capitalismo global y su ideología, independientemente de si provienen de la izquierda o de la derecha. (Si piensa que sólo se centran en los neo-nacionalistas, obviamente no ha estado prestando atención a la continua demonización de Corbyn, Mélenchon, Sahra Wagenknecht y otros izquierdistas "populistas"). Antiguamente, este era el momento en que el rey ponía la cabeza del usurpador en una estaca para recordar a todos quién era el jefe. Hoy en día, por supuesto, lo hacemos en la televisión, o en Internet, como cuando colgamos a Saddam, o sodomizamos a Gaddafi con una bayoneta. No le harán nada de eso a Trump, que es, después de todo, un usurpador estadounidense, pero lo convertirán en un ejemplo.
Así que, prepare sus palomitas de maíz, y sus horquillas, y así sucesivamente, y prepárese para animarlos mientras lo hace. ¡El futuro de la democracia está en juego! Y, si está en Twitter, asegúrese de cumplir con sus cuotas diarias de llamar fascista a Trump y alimentar la histeria fascista. Y Putin, por supuesto. No olviden a Putin... y cualquier otra histeria sin sentido que las clases dominantes capitalistas necesiten que repitamos. Confíe en mí, en unos dos años, cuando comiencen las celebraciones posteriores a la era Putin-Nazi, y la gente corra por las calles quemando efigies, tocando vuvuzelas y persiguiendo a cualquiera que lleve el sombrero equivocado, no querrá que los tomen erróneamente como si hubiese estado en el bando "populista" de la historia.
DESCARGO DE RESPONSABILIDAD: El ensayo anterior es enteramente obra de nuestro escritor satírico interno y autoproclamado experto político, CJ Hopkins, y no refleja los puntos de vista y opiniones de Consent Factory, Inc. ni de su personal, ni de ninguno de sus agentes, subsidiarias o cesionarios. Si, por alguna razón inexplicable, usted aprecia el trabajo del Sr. Hopkins y le gustaría apoyarlo, por favor vaya a su página de Patreon (donde puede contribuir con tan sólo $1 al mes), o envíe su contribución a su cuenta de PayPal, de modo que tal vez él deje de venir a nuestras oficinas tratando de conseguir dinero de nuestro personal. También puede comprar su novela satírica distópica, Zone 23, que escuchamos que es bastante divertida, o cualquiera de sus obras de teatro subversivas, que ganaron algunos premios en Gran Bretaña y Australia. Si usted no aprecia el trabajo del Sr. Hopkins y le gustaría escribirle un correo electrónico abusivo, por favor siéntase libre de contactarlo directamente.
Comentarios del Lector
a nuestro Boletín