Turquía no está satisfecha con la condena que la justicia saudí dictó por el asesinato del periodista Jamal Khashoggi, ocurrido en octubre de 2018, declaró el portavoz de la Cancillería turca, Hami Aksoy.
Jamal Kasshoggi
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Una corte saudí condenó este 23 de diciembre a la pena capital a cinco sospechosos de la muerte de Khashoggi, otros tres recibieron 24 años de cárcel. En total estaban siendo procesados 11 sujetos.
"La sentencia por el asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi está lejos de cumplir con las expectativas de nuestro país y la comunidad internacional, que esperan una investigación exhaustiva y una decisión justa", dice el comunicado.
Agrega que "cuestiones importantes, como el paradero del cuerpo del difunto, quién ordenó el asesinato y quiénes son los cómplices locales, permanecen ocultas".

Se precisa que Turquía tiene no solo responsabilidad jurídica, sino también moral por la investigación del delito cometido en su territorio.
"Esperamos la cooperación jurídica con las autoridades saudíes en el marco de la investigación de este asesinato", puntualizó Aksoy.
Khashoggi, columnista del periódico The Washington Post conocido por sus críticas a las autoridades saudíes, fue visto con vida la última vez el 2 de octubre de 2018, cuando entró en el consulado de su país en Estambul.

Mientras el consulado insistía en que el periodista había salido de la sede diplomática, el diario estadounidense fue el primero en afirmar, citando a fuentes propias, que en realidad fue torturado, asesinado y descuartizado.

Luego, ante las presiones de la comunidad internacional, Arabia Saudí admitió que Khashoggi falleció en el consulado.

De acuerdo con la investigación de Riad, el periodista fue asesinado por agentes de inteligencia saudí que debían repatriarlo, pero "abusaron de sus poderes".