arqueólogo Dennis Stanford
© Chip Clark - Museo Nacional SmithsonianoAmpliar foto
El arqueólogo Dennis Stanford muestra las herramientas hechas de piedra por los Clovis de América hace 20.000 años.
El Instituto Smithsoniano de Estados Unidos informó el 1 de marzo que, tras 10 años de estudios, se encontraron evidencias claras de que algunos seres humanos que habitaban en los Estados Unidos, hace 14.000 y 25.000 años atrás, los Clovis, provenían de Europa y, en particular, del pueblo Solutrense del norte de España y Francia. Este estudio es relatado en el libro 'Al otro lado del hielo Atlántico'.

En el libro se explica que gente del norte de España viajó a Estados Unidos en barco siguiendo el borde de una plataforma de hielo marino que unía Europa y América durante la última Edad de Hielo, hace 14.000 a 25.000 años atrás.

Este no es un descubrimiento de hoy, sino un estudio que se realizó en un período de 10 años, y en el que se acumularon numerosas pruebas, explica el informe.

En 'Al otro lado del hielo Atlántico' trabajaron arqueólogos a cargo de Bruce Bradley, de la Universidad de Exeter, en el Reino Unido, y de Dennis Stanford, del Museo Smithsoniano Nacional de Historia en Washington DC.

Ellos resaltan en el libro que por más de 400 años, se ha estado afirmando que la gente entró por primera vez a América desde Asia, a través del puente de tierra en el Mar de Beiring. Sin embargo, "ahora ya sabemos que algunas personas llegaron hace más de 15.000 años, probablemente por ambos sentidos, por mar y por tierra", destacan.

Los científicos estudiaron las herramientas de los habitantes llamados Clovis en Nuevo México. Se constató en los estudios que sus distintivas herramientas de piedra están fechadas en torno a los 12.000 años atrás.

Estas herramientas encontradas en los terrenos de los Clovis, no se han visto en Alaska o al noreste de Asia, pero sí se concentran en el sureste de los Estados Unidos y en Europa.

Los descubrimientos de la costa este de América del Norte están demostrando que las personas, que fueron los primeros antepasados ​​de los Clovis, llegaron a esta zona, a más tardar, 18.450 años atrás y posiblemente unos 23.000 años atrás, señala el estudio.

Lo científicos estiman que, por la ubicación de los encuentros arqueológicos, se realizó una migración en barcos desde Europa.

Las herramientas en cuestión, que difieren tanto de las de Alaska, corresponden muy bien a los de la cultura 'solutrense', que ocupó las regiones de España y Francia en la era Paleolítico Superior. El nombre de este pueblo deriva de los descubrimientos de la "Crot du Chamier en Solutré", en el distrito de Macon, en Saona y Loira, Francia.

"Ahora tenemos pruebas muy sólidas de que la gente vino de Europa al Nuevo Mundo hace unos 20.000 años", dice Bradley.

"Nuestros hallazgos representan un cambio de paradigma en la manera en que pensamos acerca de la historia temprana de América. Estamos desafiando a una creencia muy arraigada en la forma en que el Nuevo Mundo se estuvo poblando. La historia es más interesante y más complicada de lo que jamás hubiera imaginado", explica el arqueólogo Bruce Bradley.

En el libro 'Al otro lado del Atlántico de hielo', los autores relatan interesantes historias de como rastrearon los orígenes de la cultura Clovis hasta llegar a los solutrenses, que ocuparon el norte de España y Francia mas de 20.000 años atrás.

Ellos explican que estas personas no solo poblaron la Costa Este de América, sino que con el tiempo se difundieron, incluso, en Venezuela y en América del Sur.

Lo que aún se debe investigar, explican los científicos, es su relación con los nativos americanos contemporáneos. "Todavía no está claro", señalan. Bradley y Standford destacan, además, que no es que sugieran que las personas procedentes de Europa fueron los antepasados ​​de los modernos nativos americanos.

Sostienen que es evidente que los primeros habitantes llegaron de Asia, a Alaska, y poblaron la costa oeste de Estados Unidos. Sin embargo la historia demuestra que hay más que eso.

Uno de los aspectos mencionados es que, cuando llegaron las primeras personas a América, los niveles del mar eran casi 130 metros más bajos que en la actualidad.

Las líneas de la costa de hace 20.000 años contienen mucha de la evidencia dejada por estas primeras personas, pero ahora están bajo el océano. Esto también es el caso en Europa.

"Ahora tenemos pruebas muy sólidas de que la gente vino de Europa al Nuevo Mundo hace unos 20.000 años", dice Bradley "Este libro es el resultado de más de una década de trabajo, pero es solo el comienzo de nuestro viaje", comparten Bradley y Stanford.