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Los bancos Deutsche Bank, HSBC Securities, J.P. Morgan, Santander, BBVAFrancés, Citigroup y UBS Securities serán las entidades encargadas de tramitar la colocación de deuda, con bonos a tres, diez y treinta años por una tasa de interés que oscila entre el 6,75 y el 8 por ciento de interés.
Argentina ha logrado hasta ahora principios de acuerdo con el 90 por ciento de los fondos buitre que fueron respaldados judicialmente por los tribunales de Nueva York, y que acordaron con el Gobierno solucionar el litigio por 8.250 millones de dólares.
Quedan pendientes de ser resueltos otros 3.500 millones de dólares.
Los bonos a tres, diez y treinta años estarán bajo la jurisdicción de Nueva York, por lo que en caso de cesación de pagos, Argentina queda sometida a estos tribunales.
El Gobierno destinará en total 12.500 millones de dólares para pagar los bonos que no reestructuraron en los canjes de 2005 y 2010 los fondos buitre, los cuales tienen en sus manos el 7 por ciento de la deuda que quedó en suspensión de pagos tras la crisis de 2001.
El 93 por ciento restante canjeó su deuda durante los Gobiernos de Néstor Kirchner (2003-2007) y de Cristina Fernández (2007-2015).
El Gobierno de Macri promulgó el 1 de abril la ley que permite al Ejecutivo acordar con los fondos buitre, y que conllevaba la derogación de las leyes Cerrojo y Pago Soberano, condición impuesta por el juez estadounidense Thomas Griesa, al frente de la causa que impulsaron los fondos buitre.
El pasado miércoles, la Corte de Apelaciones de Nueva York confirmó la orden de Griesa para levantar las medidas cautelares que impedían a Argentina efectuar el pago a los bonistas que sí reestructuraron su deuda.
El actual Ejecutivo estima que podrá efectuar el pago a los fondos buitres el próximo viernes, 72 horas después de que concluya la colocación de los títulos de deuda.
Comentario: El gobierno argentino arrodillado ante la élite económica crucifica a su población con deuda ilegitima. Poco a poco, las riendas del país latinoaméricano pasan a manos de EEUU y sus grandes corporaciones; triste futuro le depara a Argentina, entre el depojo, el vasallismo y la desestabilización.