La decisión del líder estadounidense, Donald Trump, de abandonar el acuerdo nuclear con Irán, se enfrenta con la resistencia de la mayor parte del mundo: la ONU, la UE, Rusia, China y Turquía, entre otros. Europa tratará de salvar el acuerdo, y es un momento idóneo para revisar las relaciones con Washington, sugiere un investigador italiano.
Unión Europea y Estados Unidos
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La retirada del acuerdo nuclear iraní fue una de las promesas electorales de Trump que debía subrayar las diferencies con su antecesor, opina el profesor Marco Lombardi, director el Centro de Investigaciones de Terrorismo en la Universidad Católica de Milán.

"Pero esta decisión demuestra de nuevo que la América de hoy no entiende el mundo que quiere gobernar", constató el experto a Sputnik Italia.

Entre las posibles consecuencias del controvertido paso podría estar "la revisión de las alianzas políticas existentes".

Mientras EEUU pide que sus aliados le muestren el respeto tradicional para presentarse de nuevo como "líder del mundo", en realidad las relaciones políticas van evolucionando hacia un rumbo más pragmático.

"El mundo, por fin, parece haberse dado cuenta de que 'un aliado' no necesariamente significa 'un amigo', sino 'un socio' para un período determinado", explica.

Uno de los ejemplos más característicos de este nuevo enfoque es la emergente alianza entre EEUU, Israel y Arabia Saudí, precisó Lombardi.

Una oportunidad para Europa

Sin saberlo, Donald Trump creó un buen pretexto para Europa de revisar su alianza existente con Washington, sostiene el analista.

Los intereses de la UE no son iguales a los intereses de EEUU, y "Europa debería considerar una alianza euroasiática, dados los vínculos centenarios entre Asia y los países europeos".

"El chantaje de EEUU de aplicar sanciones contra los países europeos que comercien con Irán ofrece la oportunidad de deshacerse de esta 'alianza sin sentido' (...) Varios países van a reaccionar diferentemente a la presión estadounidense. El juego solo está empezando", afirma el investigador italiano.

Pero en general, Lombardi admite mostrarse escéptico ya que "Europa carece de líderes valientes necesarios para crear una resistencia".

Al volver al ejemplo de la coalición israelí-saudí-estadounidense, el investigador insta a usar esta "paradoja política inédita" para aceptar "el cambio de paradigma" y entender mejor el conflicto en Oriente Medio, todo para aprender a manejarlo.