Traducido por el equipo de Sott.net

Scotland Yard está dispuesta a ampliar su controvertida red de vigilancia por reconocimiento facial en todo Londres en un acuerdo de 3 millones de libras que permite al mayor cuerpo de policía del Reino Unido rastrear a los sospechosos utilizando imágenes antiguas de cámaras de seguridad y lredes sociales.
facial recognition
© Pixabay / Tumisu
El mes pasado, la oficina del alcalde de Londres firmó discretamente la compra de sistemas de "reconocimiento facial retrospectivo" (RFR) que procesan las imágenes existentes a las que accede la Policía Metropolitana desde diversas fuentes y las comparan con la base de datos interna del cuerpo.

En virtud del acuerdo de cuatro años, la empresa tecnológica japonesa NEC Corporation suministrará los sistemas RFR, que ofrecerán a la Policía Metropolitana (Met) "oportunidades... no disponibles anteriormente para apoyar la detección y comparación de rostros" y permitirán al cuerpo "explotar eficazmente" las oportunidades de investigación derivadas del rápido crecimiento de las "fuentes de datos de imágenes".

Aunque está previsto que el sistema entre en funcionamiento a finales de año, el organismo de control de datos del país, la Oficina del Comisario de Información (ICO), ha declarado a Wired UK que no ha publicado ninguna directriz oficial sobre el uso de los sistemas RFR y ha advertido de que se perderá la "confianza del público" si las fuerzas policiales que utilizan la tecnología no completan "pasos cruciales" para cumplir con las leyes de protección de datos "antes, durante y después de su uso".

Entre estos requisitos de cumplimiento se encuentra la realización de una Evaluación de Impacto sobre la Protección de Datos (EIPD) antes de procesar los datos personales. Según el medio de comunicación tecnológico, la Met aún no había presentado una EIPD cuando el Teniente de Alcalde de Policía y Crimen aprobó la compra de RFR, a pesar de que la propuesta de acuerdo señalaba que el sistema "garantizará un enfoque de privacidad por diseño".

Sin embargo, un portavoz anónimo de la Met dijo que tenía que identificar a un proveedor antes de publicar la EIPD. Añadieron que el uso de las imágenes estaría "sujeto a un marco cuidadosamente implementado" en relación con las "expectativas de privacidad", pero no compartieron los detalles de lo que implica este marco.

Además, el London Policing Ethics Panel (un organismo de supervisión independiente creado por la oficina del alcalde) no había revisado ni asesorado a la Met sobre el uso de RFR antes de la firma del acuerdo. El panel no se ha pronunciado aún sobre la compra.

Un portavoz de la alcaldía no identificado afirmó que la tecnología acortaría el tiempo necesario para identificar a los sospechosos y ayudaría a combatir los índices de criminalidad en la capital, pero admitió que la Met debía ser "proporcionada y transparente" con su uso para "conservar la confianza de todos los londinenses".

La semana pasada, el alcalde de Londres, Sadiq Khan, hizo pública la "Carta de Tecnologías Emergentes", que establece una serie de directrices sobre el uso de nuevas tecnologías basadas en datos en la ciudad. Aunque exime a los cuerpos de seguridad, el documento señala que tecnologías como los sistemas de reconocimiento facial "no deberían desplegarse" si no cumplen el "altísimo listón" establecido por la ICO para el uso de datos biométricos.


Comentario: ¿De qué sirve una carta si los que tienen más poder no se someten a ella?


Según un informe del organismo de control policial HM Inspectorate of Constabulary and Fire and Rescue Services, la tecnología RFR es utilizada actualmente por seis fuerzas policiales de Inglaterra y Gales. Sin embargo, Wired UK señaló que la información y el análisis disponibles públicamente sobre la forma en que estas fuerzas policiales la utilizan son "escasos", a diferencia de lo que ocurre con la tecnología de "reconocimiento facial en vivo" (LFR, por sus siglas en inglés), que es utilizada por la Met y otras fuerzas para escanear rostros en tiempo real y compararlos con una "lista de vigilancia".

La Met ha continuado desplegando la tecnología LFR a pesar de que un comité de la Cámara de los Comunes no recomendó su uso en julio de 2019. En su propuesta de compra, el cuerpo afirma repetidamente que el uso de RFR es "muy diferente" al de LFR. Al parecer, la Met se abastece de ambos productos a través de NEC Corporation, que no ha querido hacer comentarios.

Sin embargo, Daragh Murray, un profesor de la Universidad de Essex que ha revisado el uso de la tecnología de reconocimiento facial por la Met, dijo al medio que los dos sistemas tienen el potencial de ser "masivamente invasivos" y podrían ser "sorprendentemente similares" dependiendo de cómo se apliquen.