Una superpotencia en declive aún conserva un gran apetito por la guerra indirecta e irregular para retardar el inminente orden multipolar. Irán, Rusia y China son sus grandes objetivos y todas las herramientas serán empleadas.
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Aunque Washington ya no puede permitirse los elevados costes de embarcarse en guerras directas intensas, su complejo militar-industrial -el motor de la economía estadounidense- tampoco puede permitirse desentenderse de los conflictos mundiales. Por lo tanto, la estrategia militar estadounidense ha pasado de hacer la guerra a llevarla a sus adversarios, a través de apoderados (NdT: proxies).
La idea es capitalizar el envío de armas y equipamiento militar a los proxies estadounidenses para hundir a sus adversarios en prolongados atolladeros. Las guerras del siglo XXI del Pentágono son de "espectro completo", lo que significa que se emplean todas las herramientas de la guerra, incluyendo sanciones, desinformación y sabotaje, con el fin de causar trastornos importantes en la estabilidad social, política y económica de un Estado adversario.
El objetivo final de Washington es transformar a sus adversarios en Estados clientes subordinados, o neutralizarlos hasta tal punto que ya no puedan oponerse a la hegemonía estadounidense.
Como dejó claro el congresista estadounidense Adam Schiff ya en enero de 2020, "Estados Unidos ayuda a Ucrania y a su pueblo para que podamos luchar contra Rusia allí y no tengamos que luchar contra Rusia aquí". En febrero de 2022, Rusia comenzó a contraatacar a Estados Unidos en Ucrania, sin que se vislumbre el final de ese conflicto.
Guerra no convencional
El complejo militar-industrial estadounidense ya ha comenzado a planificar y promover la guerra de China contra Taiwán con un presupuesto previsto de 22.690 millones de dólares asignados a la Iniciativa de Disuasión del Pacífico. Estas "iniciativas de disuasión" suelen incluir una gran presencia militar en los territorios del "proxy", provocando así al adversario hacia una confrontación.
La estrategia de Washington hacia su antiguo enemigo iraní ha sido más compleja e implica el uso de sanciones, asesinatos, ciberataques y guerra de la información para contrarrestar a Teherán en Asia Occidental, tanto directamente como a través de los Estados regionales clientes de Estados Unidos.
Mientras que el sueño de EE.UU. siempre ha sido "Libia-fiar" a Irán -claramente imposible, de lo contrario el Pentágono ya lo habría hecho- el plan B busca arrastrar al país a un conflicto civil prolongado y replicar el modelo sirio para dividir y saquear el país.
Las capacidades militares de Irán han crecido en una sofisticación y alcance sin precedentes en los últimos años, convirtiéndolo en una fuerza resiliente para contrarrestar las ambiciones de la OTAN en Asia Occidental. Por eso, la vieja promesa de Washington de que todas las opciones están sobre la mesa se ha transformado cada vez más en un escenario de guerra híbrida.
La propaganda y las protestas en Irán
Tras la muerte de Mahsa Amini bajo custodia policial el pasado mes de septiembre, muchos iraníes salieron a la calle para exigir justicia y rendición de cuentas. En pocos días de protestas, un movimiento civil centrado específicamente en los derechos de las mujeres adquirió rápidamente las características de una guerra híbrida que opera en múltiples frentes: desde el "astroturfing" en las redes sociales hasta el linchamiento de agentes de policía y fuerzas de seguridad por parte de turbas de jóvenes hombres entrenados y armados.
Los medios de comunicación occidentales, que obtienen la mayoría de sus datos de fuentes anónimas, rara vez o nunca informaron sobre estos ataques de turbas de hombres, probablemente porque habría chocado con su encantadora narrativa de una "revolución feminista".
Gran parte de la propaganda cibernética se atribuye a miembros del Mojahedin-e-Khalq (MEK), ahora rebautizado como Consejo Nacional de Resistencia de Irán (NCRI). El MEK, que en su día fue un grupo terrorista designado por Estados Unidos que luchó junto a Sadam Husein en la guerra entre Irán e Irak -por lo que es ampliamente vilipendiado entre los iraníes de todas las tendencias políticas-, cuenta hoy con el apoyo incondicional de personas como John Bolton y Mike Pompeo, asesor de seguridad nacional y secretario de Estado de la administración Trump, respectivamente.
El MEK lleva años dirigiendo criaderos de troles desde sus "campamentos" en Albania, y durante mucho tiempo han constituido la columna vertebral de la propaganda en línea contra el Estado iraní.
En otoño, una narrativa para justificar el conflicto armado -con cierto matiz de feminidad- comenzó a ser ampliamente propagada en los medios de comunicación extranjeros. Desde septiembre, los medios de comunicación en lengua persa financiados por Occidente han fomentado abiertamente la adhesión de los iraníes a la "guerra" y el recurso al "sabotaje honorable" (خرابکاری شرافتمندانه).
Iran International, una agencia de noticias con sede en Londres y financiada por Arabia Saudita, invitó a la investigadora académica de Virginia Tech Shukriya Bradost a opinar sobre los acontecimientos en Irán. Al igual que Amini, la joven protagonista del movimiento de protesta, Bradost es de origen kurdo y llamó al asesinato de los kurdos que cooperan con el gobierno iraní. Aunque afirmó que esas personas ya están siendo identificadas, añadió:
"Esta es una gran táctica en el campo de batalla porque crea miedo en el enemigo. El miedo a ser identificados obligará a quienes cooperan con el régimen a dejar de cooperar porque, como hemos visto en Bukan y otras ciudades, el destino de esas personas es el que les corresponde, que es ser asesinadas por cooperar con el régimen."A medida que se intensificaba la matanza de policías y fuerzas de seguridad, otro invitado, denominado "activista iraní-canadiense" por la CBC de Canadá, apareció en Irán Internacional e instó a los iraníes a matar a la policía:
"En una guerra no es posible atenerse a la moral. Debemos reconocer que estamos en guerra con la República Islámica... matar policías es moral. Si tienes la oportunidad [de matar a un policía] y te niegas a hacerlo, eso sería inmoral."Ilógicamente, cuando posteriormente fue entrevistada por CBC News, la misma "activista" afirmó que las acusaciones iraníes de violencia por parte de los alborotadores detenidos son falsas. En el informe, explica a su audiencia canadiense que ella "se centra en la comprobación de los hechos y la propaganda... porque el régimen a menudo es capaz de 'distorsionar la verdad' amplificando las acusaciones falsas."
Tras una serie de detenciones y procesamientos en Irán, un antiguo reportero de la Voz de América (VOA) ofreció recompensas en Twitter por el asesinato de abogados, investigadores y jueces iraníes implicados en casos relacionados con protestas, ofreciendo el pago en bitcoin por los asesinatos, tras haber publicado sus nombres y direcciones en Internet. Más tarde anunció en Twitter que había tenido que retirar sus mensajes debido a las políticas de la compañía, pero que su oferta seguía en pie.
La incitación a la violencia a través de sustitutos es una táctica común en la guerra híbrida subversiva occidental, y tiene por objeto explotar las consecuencias si las fuerzas de seguridad responden, o bien retratarlas como débiles e ineficaces si no lo hacen.
Como era de esperar, los eslóganes de "sabotaje honorable" y "asesinato moral", junto con la cobertura de los medios de comunicación occidentales, pronto perdieron fuerza después de que Irán reanudara las conversaciones nucleares con países de la UE asolados por una crisis energética global y necesitados de energía barata.
El empleo de Azerbaiyán en la guerra híbrida contra Irán
Tras la segunda guerra de Nagorno-Karabaj en 2020 entre Armenia y Azerbaiyán, Irán ha entrado cada vez más en conflicto con Bakú. Un punto de discordia son las aspiraciones del presidente Ilham Aliyev de crear un Corredor de Turán para alterar las fronteras internacionales entre Irán y Armenia. Irán se ha opuesto enérgicamente a las intrusiones de Bakú en la región armenia de Syunik y ha prometido utilizar todos los medios necesarios para impedir cambios en sus fronteras nacionales.
El Centro de Investigación del Consejo Estratégico de Relaciones Exteriores de Irán publicó recientemente un artículo en el que se sugiere que la segunda guerra de Karabaj fue una cobertura para crear el Corredor de Turán de la OTAN en Zangezur, un corredor similar al Corredor de Danzig de Hitler, cuya creación fue ideológica y tenía como objetivo realizar cambios geopolíticos antes del inicio de la Segunda Guerra Mundial.
El artículo sostiene que el Corredor de Turán está diseñado para llevar a la OTAN directamente a las fronteras septentrionales de Irán, las meridionales de Rusia y las occidentales de China en Xinjiang - y cercar a Rusia desde el Mar Negro, a China desde el Mar de China Meridional y a Irán desde el Golfo Pérsico.
El Corredor de Turán de la OTAN también debilitará geopolíticamente a Irán, Rusia y China y permitirá a la alianza militar occidental fomentar los disturbios étnicos entre los azaríes en Irán, los tártaros en Rusia y los uigures en China.
Inexplicablemente, en el momento álgido de las protestas "feministas" de Irán, un atentado terrorista del ISIS en Shiraz se cobró la vida de 15 personas. Las tensiones entre Bakú y Teherán se intensificaron aún más después de que saliera a la luz que el autor del atentado había entrado a Teherán desde el aeropuerto internacional Heydar Aliyev de Bakú. Poco después de que salieran a la luz estos informes, Bakú detuvo a cinco azerbaiyanos acusados de espiar para Teherán.
También hay informes de hace más de una década que advierten de la presencia en Bakú del MEK de Albania, que ha ejecutado atentados y asesinatos en Irán durante muchas décadas.
Tras la reciente visita de Aliyev a Albania, informes no oficiales han sugerido que podría haber planes para reasentar parcialmente a los miembros del MEK en Bakú. Irán ha advertido que permitir que Azerbaiyán se convierta en un refugio seguro para terroristas y actores malignos será visto como un acto de guerra y pondrá fin al gobierno de Aliyev.
Mujer, vida, libertad... y OTAN
La construcción occidental de "Mujer, Vida, Libertad" se hizo aún más evidente cuando miles de personas se reunieron en Berlín, la capital de un país que hasta hace poco era el centro europeo del gas ruso y se resistía a seguir la línea de la OTAN en la guerra entre Rusia y Ucrania.
Decenas de miles de manifestantes unieron sus fuerzas en Berlín para apoyar a las mujeres iraníes, todo ello mientras ondeaban la bandera de la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria (un régimen kurdo respaldado por Estados Unidos), la bandera del Ejército Sirio Libre, la bandera del Kurdistán iraquí, la bandera de los terroristas de Jaish al Adl que operan en la frontera pakistaní de Irán, y la bandera de Al-Ahwaz, un grupo terrorista respaldado por Arabia Saudita que busca apoderarse del sur del territorio iraní. Las banderas de Azerbaiyán, Ucrania e Israel también estaban entre las partidarias de las "mujeres en Irán".
Y se reunieron para narrar un "sueño", un sueño en el que "...los países vecinos [de Irán] tendrán paz", un sueño en el que "no hay caos ni conflictos en Siria, Líbano e Irak", un sueño en el que "nadie da armas a Putin para que mate ucranianos", un sueño en el que "las [reservas] de petróleo son una bendición, no una plaga...", y "este sueño sólo se hará realidad con el derrocamiento de la República Islámica".
El mismo día, el presidente estadounidense Joe Biden prometió apoyar el "sueño iraní". Una vez más, Estados Unidos ha movilizado a sus "rebeldes moderados" y "ejércitos de la libertad" para convertir la plaga del petróleo en otro país de Asia Occidental en una bendición. Esta vez, sin embargo, la crisis energética mundial está asolando a los países de la OTAN, y lo que está en juego es más importante.
Un Irán desestabilizado no sólo perturba al socio estratégico clave de Rusia en Asia Occidental que limita con el Cáucaso Meridional, Afganistán e Irak, estratégicamente vitales, sino que también proporciona una oportunidad para dar luz verde al Corredor de Turán de la OTAN, con consecuencias geopolíticas catastróficas para Irán, Rusia y China.
Mujer, Vida, Libertad -cualquiera sea su procedencia- es ahora un lema para la guerra irregular en un Estado adversario de Estados Unidos.
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