Tras días de advertencias del Servicio Estatal de Meteorología turco, las tormentas y fuertes lluvias paralizaron la vida cotidiana en toda Turquía.
La gente que paseaba por la plaza Taksim tenía dificultades para caminar debido a la tormenta, mientras que las olas subían metros de altura en la costa, especialmente en la costa de Üsküdar.
La tormenta que azotó el distrito de Silivri de Estambul a primeras horas de la mañana tuvo un impacto negativo en la vida de las personas. Cuando las olas se adentraron varios metros en el mar, los lugares de trabajo de la playa se inundaron. La tormenta arrancó árboles.
En la provincia occidental de Esmirna, el mar se desbordó y el agua se mezcló con el pavimento. Los ciudadanos varados en el inundado mar fueron rescatados por la policía.
La lluvia, que se intensificó durante la noche en la provincia meridional de Antalya, inundó canales y dejó vehículos varados en las carreteras.
Dos embarcaciones se hundieron en Side, un centro turístico del distrito de Manavgat, en Antalya. La tormenta también afectó a la ciudad. Algunos de los árboles caídos en muchas partes de la ciudad cayeron sobre los coches y algunos bloquearon las carreteras. Como consecuencia, muchos vehículos resultaron dañados.
En la provincia suroriental de Gaziantep, el aguacero que comenzó por la noche continuó en horas de la mañana. Junto con las precipitaciones, una espesa niebla también afectó a algunas partes de la ciudad.
En la provincia occidental de Denizli, un fuerte viento que empezó hacia las 2 de la madrugada fue especialmente fuerte en el centro de la ciudad. El tejado de un edificio voló por los aires y el viento arrancó árboles.
Las lluvias y tormentas también afectaron a la provincia noroccidental de Bursa. Por la mañana voló el tejado de una casa. La policía y los bomberos fueron enviados a la zona.
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