Nunca fui fan de Michael Jackson (MJ). Ni lo que había oído de su música ni lo que había visto de sus rutinas de baile me atraían, aunque su moonwalk me parecía bastante guay. Así que el genio artístico de MJ se me escapaba, hasta que hace muy poco empecé a prestarle atención y me di cuenta de que su genialidad (en el sentido romano) iba más allá de la música y el baile. Tenía la vaga impresión de que era un producto de la industria del entretenimiento y que su fama era inmerecida. Y, por supuesto, me había influido mucho la mala prensa que había tenido desde principios de los 90, de modo que imaginaba que era, como mínimo, un individuo muy perturbado.
Pero entonces escuché el vídeo de Candace Owens, "Lo que le pasó realmente a Michael Jackson" publicado el mes pasado, y me enteré de que MJ tenía poderosos y desagradables enemigos judíos que conspiraron para destruir su reputación, su riqueza y su salud. Eso despertó mi interés, ya que el poder judío es uno de mis campos de investigación.
Una rápida búsqueda me llevó al asombroso descubrimiento de que, en 1995, dos años después de que se hicieran las primeras acusaciones de pederastia contra él, Michael Jackson lanzó un single titulado They don't Care About Us (A ellos no les importamos), que incluía la letra:
Jew me, sue me¡Vaya! El Rey del Pop, cuyo disco Thriller de 1982 es el más vendido de todos los tiempos (32 millones de copias), ¿diciendo eso, en una canción de éxito, para que la oiga todo el mundo? Sony ocultó las palabras ofensivas (jew y kike) (judío) con grotescos sonidos pesados, pero la letra permaneció sin censura, y la versión original aún puede escucharse aquí (1:10).
Everybody, do me
Kick me, Kike me
Don't you black or white me.
Judaízame, demándame,
todo el mundo lo hace.
Pégame, judaízame (insultando),
no me hagas negro o blanco.
Fue entonces cuando recordé que Monika Wiesak había escrito un libro sobre MJ. Como me había encantado su anterior libro, El último presidente de Estados Unidos: Lo que el mundo perdió cuando perdió a John F. Kennedy, leí su Michael Jackson: el hombre, la música, la controversia, de 2023. He aquí mi reseña de este libro maravilloso y necesario, con algunos datos adicionales.
En La historia de Michael Jackson, escribe Wiesak: "ofrece una visión esclarecedora del mundo del espectáculo, los medios de comunicación y el poder" (p. v). Y así es. En particular, sobre el poder judío, que es uno de mis campos de investigación.
En los primeros capítulos, Wiesak ofrece un retrato del hombre, basado en los testimonios de quienes le conocieron bien. Sin duda, MJ se presenta como una persona "amable, reflexiva y empática". Wiesak cita los mensajes positivos de sus letras, con los que "intentaba llegar a la bondad que reside en la mayor parte de la humanidad y sacarla a la luz" (pág. 158). Todos recordamos el single benéfico "We are the world" (1985), escrito por MJ con un poco de ayuda de Lionel Richie (aquí está la preciosa versión original de la maqueta de MJ), e interpretado por cuarenta y cuatro estrellas de la música bajo el nombre de USA for Africa para recaudar fondos para Etiopía, asolada por la hambruna. Fue un fenómeno mundial y supuso la culminación de la influencia de MJ en la industria musical.
La canción Heal the World (1991) también resume la esencia del mensaje ingenuo pero bondadoso de MJ. El videoclip mostraba a niños de todo el mundo uniéndose por la paz e inspirando a los soldados a tirar sus armas.
La letra de MJ para su canción "Palestine, Don't Cry", que escribió en 1993 pero nunca llegó a completar y grabar, contiene los versos:
Rezaré por ti,Al final de la canción "Earth Song" (1995), Michael canta "What about the holy land, torn apart by creed" (¿Qué pasa con la tierra santa, desgarrada por el credo?), pero si escuchas la versión a capela, en el minuto 4:30 "creed" suena más como "greed" (codicia).
oh, Palestina...
Dios tiene un lugar para ti...
Ven a lo profundo de mi corazón.
Siempre te amaré...
Y creo en ti,
oh, Palestina,
moriré por ti.
A menudo se dice que MJ siguió siendo infantil porque no tuvo una infancia normal. Pero aunque hay algo de verdad en ello, MJ también se revela como una persona profunda. Me impresiona lo que dijo en 2001 sobre su padre, al que llevaba mucho tiempo resentido por su control abusivo:
He empezado a ver que incluso la dureza de mi padre era una especie de amor, un amor imperfecto, sin duda, pero amor al fin y al cabo. Me empujaba porque me quería, porque quería que ningún hombre menospreciara jamás a su descendencia. Y ahora, con el tiempo, en lugar de amargura, siento bendición. En el lugar de ira, he encontrado absolución. Y en el lugar de venganza, he encontrado reconciliación (págs. 5-6).Tales palabras proceden de un hombre que ha madurado hasta alcanzar la sabiduría. Por el contrario, como veremos, sus enemigos parecen haber sido personas extremadamente negativas, codiciosas y crueles.
Paradójicamente, MJ era una persona muy tímida con una relación complicada con su propio cuerpo. Esto es comprensible para un hombre que ha pasado por las transformaciones físicas de la infancia a la adolescencia (con acné severo) y a la edad adulta, bajo los focos. Pero los medios de comunicación han exagerado maliciosamente sus impedimentos psicológicos. Durante décadas han insinuado que se blanqueaba la piel intencionadamente, pero en el libro de Wiesak me enteré de que padecía una enfermedad llamada vitíligo, probablemente desencadenada por las graves quemaduras que sufrió en el cuero cabelludo en 1984, que le provocaron manchas irregulares de piel blanca que se extendían por todo el cuerpo, cara incluida. Lo explica su amigo David Nordahl:
El vitíligo se extendía y extendía y extendía, y cuando tenía que aparecer en público o actuar le resultaba difícil maquillarse correctamente... Así que, al principio, utilizaba maquillaje más oscuro para cubrirlo, pero a medida que se extendía, cada vez era más difícil hacer que esa piel blanca fuera del color del resto de su piel, así que tenía que utilizar maquillaje cada vez más claro porque... cuando sudas... no quieres que esas líneas blancas te recorran la cara (págs. 10-11).En cuanto a sus operaciones de cirugía plástica de nariz, ayuda oírle decir lo mal que se sentía de adolescente cuando su padre le llamaba "nariz gorda" y "feo".
En 1985, la prensa empezó a publicar historias brutalmente negativas sobre MJ, llamándole "Wacko Jacko". No parece que esta mala prensa tuviera motivos comerciales. Michael estaba en la cima de su fama. ¿Fue su enorme influencia espiritual en el mundo de la música a través del éxito de We are the world, que batió todos los récords? ¿Es una coincidencia que el rap gangsta empezara a promocionarse tanto en aquella época? El mensaje de MJ era exactamente lo contrario de la cultura del rap, como ilustra el clip de Beat it. MJ estaba definitivamente fuera de sintonía con el mensaje y el espíritu que los productores querían inyectar en la América negra.
Los testimonios de algunos reporteros indican que atacar sistemáticamente a MJ fue una política editorial que les impusieron desde arriba (pág. 14). ¿Por qué? "Los grandes medios de comunicación corporativos", escribe Wiesak, "son una herramienta del imperio. Difunden propaganda y moldean nuestra sociedad. Nos convencen de que vale la pena luchar en la guerra. Moldean nuestra cultura. Y deshumanizan a sus enemigos" (pág. 158). Evidentemente, algunos poderosos que controlan los grandes medios de comunicación corporativos habían decidido que MJ era su enemigo. Recordaba su hijo Prince:
Llegaba a casa preocupado por su seguridad, por su carrera, por su patrimonio, porque sentía que estaba cabreando a la gente equivocada y eso le estaba poniendo una diana en la espalda, ya fuera por sus mensajes de unidad o por llamar a otras entidades, por la razón que fuera, le estaba poniendo una diana en la espalda (pág. 159).En agosto de 1993, MJ fue acusado de haber abusado sexualmente de Jordan Chandler, de 13 años. Más tarde se reveló que el padre de Jordan, Evan Chandler, había obligado a su hijo, y posiblemente drogado, a hacer estas acusaciones. Jordan, resentido, exigiría y obtendría un año después, a los 14 años, la emancipación legal de sus dos padres.
Evan Chandler era un dentista con un historial de mala praxis y con ambiciones como guionista de Hollywood, que había intentado y fracasado en su intento de utilizar la amistad de su hijo con MJ para su propio beneficio. El 8 de julio de 1993, fue grabado por teléfono por David Schwartz, el marido de su exmujer, explicando su plan para destruir a MJ. Hablando de su abogado, dijo (la grabación puede escucharse en el vídeo de Owens, en el minuto 15):
Escogí al hijo de puta más asqueroso que pude encontrar, y lo único que quiere es sacar esto a la luz pública tan rápido como pueda, tan grande como pueda, y humillar a tanta gente como pueda... Quiero decir, podría ser una masacre si no consigo lo que quiero... Una vez que haga esa llamada telefónica, este tipo sólo va a destruir a todos a la vista de cualquier forma tortuosa, desagradable, cruel que pueda. Y le he dado plena autoridad para hacerlo... Si sigo adelante con esto, gano a lo grande. No hay manera de que pierda. Lo he comprobado a fondo... Tengo todo lo que quiero, y... La carrera de Michael habrá terminado... Este hombre va a ser humillado más allá de lo imaginable. No lo va a creer. No creerá lo que le va a pasar, más allá de sus peores pesadillas. No venderá ni un disco más... Hay otras personas implicadas que están esperando mi llamada y que van a estar intencionadamente en ciertas posiciones... Todo va según un plan que no es sólo mío (pág. 62).Por "si no consigo lo que quiero", Evan Chandler se refería aparentemente a 20 millones de dólares, que al final consiguió, aunque MJ fue absuelto de todos los cargos. Pero, ¿qué quería decir Chandler con "cierto plan que no es sólo mío"? ¿Qué plan y de quién?
Lo has adivinado. Evan Chandler era judío (nombre original: Evan Robert Charmatz). El "hijo de puta más asqueroso" que contrató fue el abogado judío Barry Rothman, que se asoció con el psiquiatra judío Dr. Mathis Abrams para armar el caso. Otro judío se unió a la lucha: Samuel Isaac Gordon, entonces marido y representante de la hermana de MJ, LaToya Jackson, que la presionó para que declarara que, sí, su hermano era un pedófilo. Ella admitió más tarde haber mentido a petición de su marido.
Evidentemente, los ataques contra MJ no procedían únicamente de una nefasta banda judía, sino que implicaban una conspiración más amplia. Es difícil resistirse a la hipótesis de una directiva enviada desde la B'nai B'rith a los más altos niveles de la policía y la justicia.
La policía se empleó a fondo contra Michael Jackson. Interrogaron a cerca de treinta niños y a sus familias y a unos doscientos testigos en total. Viajaron a Filipinas y Australia con dinero de los contribuyentes, en busca de información. Varios padres se quejaron al abogado de Michael, Bert Fields, de que los agentes de policía les dijeron inequívocamente que Michael había abusado de sus hijos, a pesar de que estos lo negaban. La policía dijo falsamente a los niños que tenían fotos de ellos desnudos, intentando asustarles para que denunciaran (pág. 68).El efecto sobre la salud de MJ fue grave. Pero se defendió con su álbum HIStory, "el álbum más personal de Michael", según Wiesak. Contiene la canción "They don't care about us" que he mencionado antes, cuyo clip original muestra a MJ en una prisión, a veces esposado. También incluye la preciosa "Earth Song". Otra canción, "Tabloid Junkie", habla de la manipulación de los medios, diciendo:
Mientras tanto, la policía, a falta de pruebas en su registro de la propiedad de Michael y sus entrevistas con testigos, emitió una orden para un registro corporal completo de Michael. El 20 de diciembre, le sometieron a un humillante cacheo al desnudo. La policía fotografió y grabó en vídeo sus genitales y sus nalgas (pág. 72).
It's slander!Por cierto, como señala Wiesac (pág. 82), la canción menciona el asesinato de JFK ("Truth be told, the grassy knoll") (A decir verdad, el montículo de hierba), y la distorsión mediática de la imagen de JFK.
You say it's not a sword
But with your pen you torture men,
You'd crucify the Lord.
¡Es una calumnia!
Dices que no es una espada
pero con tu pluma torturas a los hombres,
crucificarías al Señor.
Aunque la policía nunca pudo avanzar en su investigación criminal (dos grandes jurados se negaron a acusar a Michael en 1994), los medios de comunicación siguieron acosándole hasta la década de los 2000.
En 2003 se emitió el documental Living with Michael Jackson, del cineasta británico Martin Bashir, que había pasado varios meses con MJ en su rancho Neverland de California. Editando las palabras de MJ, la película insinuaba que MJ compartía su cama con los niños, cuando en realidad MJ había declarado que dormía en el suelo y permitía a los niños usar la cama. Basándose en esta retorcida presentación de la relación de MJ con los niños, un niño de trece años que aparecía en la película, Gavin Arvizo, fue empujado por sus padres a acusar a MJ de abuso sexual. Fue representado por los abogados judíos William Dickerman y Larry Feldman, que contrataron los servicios del psicólogo judío Stanley Katz. El juicio comenzó a principios de 2005 y duró cinco meses. Monika Wiesak escribe:
El juicio, en circunstancias normales, nunca debería haberse celebrado. La cronología no tenía sentido. Los detalles de las acusaciones cambiaban constantemente. Los Arvizo estaban enfadados porque Michael se había distanciado de ellos. Este enfado no era muy distinto al de Evan Chandler cuando Michael dejó de hablarle. Los Arvizo tenían una credibilidad mínima y un historial de búsqueda de pagos de famosos y de demandas dudosas. No había pruebas que respaldaran sus afirmaciones. No había testimonios creíbles de testigos que los corroboraran ni pruebas físicas. Muchos de los testigos de la acusación eran personas con antecedentes muy dudosos: personas que vendieron historias a la prensa sensacionalista a cambio de una indemnización y personas a las que Michael Jackson había demandado con éxito.El juicio pasó factura a MJ, cuya salud física y mental se deterioró. Dejaré que leas el resto de la historia en los fascinantes capítulos finales de Monika Wiesak. Sólo mencionaré el detalle de que "a los pocos días del fallecimiento de Michael, se difundió a la prensa un breve fragmento de MJ interpretando una parte de su canción They Don't Care About Us", que los medios reprodujeron una y otra vez (pág. 142). Es la canción en la que MJ se quejaba de ser "judaizado" y "judaizado (como insulto)". ¿Podría ser una especie de firma críptica, al estilo del umbrella-man?
Sin embargo, durante cinco meses y los dos años anteriores, a partir de la emisión del documental de Bashir, la prensa habló en gran medida de las acusaciones como si fueran hechos, como si hubiera pruebas masivas que las respaldaran. Hicieron pasar a Michael Jackson por un infierno y mancharon su reputación en cada oportunidad. A pesar de que las acusaciones eran manifiestamente absurdas, Michael tuvo que enfrentarse durante dos años a la posibilidad de pasar el resto de su vida en la cárcel. El trato que recibió fue cruel y criminal. Pero el jurado se dio cuenta. Resistieron la enorme presión mediática y absolvieron a Michael Jackson de todos los cargos (págs. 108-9).
Pero, ¿por qué exactamente MJ sería destruido y finalmente asesinado? ¿Se sentía el poder judío amenazado por su inmensa influencia? MJ había dicho una vez a Oprah Winfrey: "Creo que todo arte tiene como objetivo último la unión de lo material y lo espiritual, lo humano y lo divino. Creo que esa es la razón de ser del arte" (pág. iv). ¿No es exactamente lo contrario de la dirección que ha tomado la música pop desde la muerte de MJ? Echa un vistazo a la satánica actuación de Sam Smith en los Grammy de 2023, vista por millones de niños. El sobrino de Michael comentó en X:
¡¡¿En qué se está convirtiendo nuestro mundo?!! Gente/organizaciones intentan cancelar a alguien que cantó "Heal The World", "Man In The Mirror" y "We Are The World" pero están todos de acuerdo con que este tipo @samsmith realice este lavado de cerebro satánico a nuestra juventud... No, gracias.En Man in the Mirror, del álbum Bad (1988), MJ nos insta: "Si quieres hacer del mundo un lugar mejor, mírate a ti mismo y luego haz un cambio". Lo explicaba en su autobiografía Moon Walk: "Es lo mismo de lo que hablaba Kennedy cuando dijo: 'No preguntes qué puede hacer tu país por ti; pregunta qué puedes hacer tú por tu país'" (Wiesak, pág. 27). En la canción "Another Part of Me" (1988) Michael cantó sobre la unidad de la humanidad:
Estoy enviando un gran amor, y este es mi mensaje para ti: Los planetas se están alineando, estamos trayendo días más brillantes. Están todos en fila, esperándote. ¿No lo ves? Sólo eres otra parte de mí.Tal vez Michael Jackson fue destruido porque su llamamiento a la paz y la unidad fue rechazado por los poderes que prosperan a través de la división y la violencia. Su bondad era peligrosamente contagiosa.
Todavía lo es. Millones de personas lo aman y lloran hasta hoy, especialmente entre los negros estadounidenses. Probablemente por eso los medios de comunicación siguen vilipendiándole. Recuerda a lo que Jim DiEugenio llamó "el asesinato póstumo de JFK", la obsesión por "sofocar cualquier legado que pudiera perdurar". A principios de 2019 se emitió el calumnioso documental televisivo Leaving Neverland, basado en las entrevistas a dos hombres adultos, Wade Robson y James Safechuck, que aseguraban haber sido violados por MJ, entre 1988 y 1996. "La reacción de la prensa fue brutal", escribe Wiesak: "sin la debida diligencia. Los titulares corrían con la suposición de que estos dos hombres decían la verdad. Prácticamente ninguno de los artículos publicados investigó la veracidad de las afirmaciones" (pág. 146). La prensa "pidió a gritos la cancelación de la música de Michael. No les bastó con atormentar a Michael en vida; intentaron destruir su memoria y su música en la muerte. No hubo descanso en paz para Michael Jackson" (pág. 156).
Al final, la destrucción de MJ fue también una demostración de fuerza: El poder judío demostró que reinaba en la industria del entretenimiento y que nadie podía desafiarles sin pagar el precio más alto. Matar al rebelde Rey del Pop fue probablemente, para ellos, un desafío de la misma magnitud que el asesinato a plena luz del día del Presidente estadounidense que se les había resistido. [...] A Michael Jackson le encantaba estar rodeado de niños y hacerlos felices. Sí, no era raro que muchos niños, incluidos sus sobrinos, se quedaran en la habitación de Michael para fiestas de pijamas en Neverland. ¿Ves algo inapropiado en este vídeo? Haber tergiversado el amor de Michael por los niños como pedofilia es la calumnia más rencorosa que uno pueda imaginar. Es obra de gente muy malvada.
Es importante recordar esta historia de un hombre bueno e inocente acusado de pedofilia una y otra vez, a la luz de las revelaciones de hoy sobre P. Diddy (Sean Combs), cuya carrera de 30 años como rapero y chantajista sexual fue lanzada por el ejecutivo discográfico judío Lucian Grainge, y por el productor judío gay Clive Davis.
Por cierto, hemos descubierto recientemente que el jefe de seguridad de P. Diddy había sido el jefe de seguridad de MJ durante los últimos siete meses de la vida de MJ, y el segundo hombre en la escena cuando MJ murió. Su nombre es Faheem Muhammad (escucha a Ian Carrol aquí). Cuatro días antes de su muerte, MJ pidió a Muhammad que llamara a la enfermera de atención sanitaria holística, la Dra. Cherilyn Lee, que antes le había advertido que no tomara el propofol que le estaba administrando el Dr. Conrad Murray y que acabaría matándole. Lee testificó durante el juicio por homicidio involuntario de Murray que le dijo a Muhammad que estaría allí el 25 de junio para ayudar a Michael y que, mientras tanto, Muhammad debía llevar a Michael al hospital inmediatamente. Pero, por supuesto, Muhammad no llevó a Michael al hospital y, en su lugar, Michael murió el 25 de junio. Muhammad declaró en el estrado que no recuerda que Lee le pidiera que llamara al 911 o que llevara a Michael al hospital (aquí en el minuto 10:50). Y ahora nos enteramos por Rodney Jones Jr que P. Diddy llama a Muhammad su "chico de la limpieza", que tiene "el poder de hacer desaparecer a la gente y los problemas".
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