Investigadores de la Universidad de Wyoming, en Estados Unidos, han hallado pruebas de que pueblos norteamericanos elaboraban agujas con agujeros hace 13.000 años manipulando huesos de animales peludos, lo que revela parte de los hábitos de los primeros pueblos nativos de Norteamérica.
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© Todd Surovell/Universidade de Wyoming
El hallazgo en un importante yacimiento arqueológico de EEUU revela que los primitivos habitantes de la región fabricaban agujas con los huesos de animales como zorros, liebres, conejos, linces, leones de montaña y el extinto guepardo americano para fabricar la ropa necesaria para sobrevivir en climas más fríos, según un estudio dirigido por el arqueólogo Spencer Pelton.
"Nuestros resultados aportan pruebas sólidas de la fabricación de prendas de vestir a medida utilizando agujas de hueso y pieles de animales con pelo. Estas prendas permitieron en parte la dispersión de los humanos modernos hacia las latitudes septentrionales y, finalmente, la colonización de América", afirman.
"Nuestro estudio es el primero en identificar las especies y los elementos probables a partir de los cuales los paleoindios fabricaban agujas de hueso con agujeros", escribieron los investigadores en su artículo.

Los humanos del Paleolítico utilizaban el animal entero para mucho más que alimentarse, lo que no es sorprendente dado el entorno hostil que requería ropa de abrigo. Pero el descubrimiento de 32 agujas de hueso aportó una complejidad artesanal con todo lujo de detalles sobre cómo vivían estos antepasados americanos y cómo se adaptaban a los atroces entornos que les rodeaban.
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© Todd Surovell/Universidade de WyomingUna aguja de hueso de zorro rojo de 13.000 años de antigüedad
El yacimiento arqueológico de LaPrele, en el condado de Converse, conserva los restos de un mamut subadulto muerto o capturado y un campamento asociado ocupado durante la época en que se sacrificó al animal, hace casi 13.000 años. Se trata de un espacio importante para recabar datos sobre cómo se comportaban las primeras comunidades de América y el grado de desarrollo de sus sociedades, mostrando un importante nivel de innovación en la producción de ropa a medida.

En las excavaciones, dirigidas por el profesor Todd Surovell, del Departamento de Antropología de la Universidad de Wisconsin, se encontró la cuenta más antigua conocida hasta la fecha en América, hecha de hueso de liebre, y agujas fabricadas con diversos huesos que, según los análisis, tienen entre 13.500 y 12.000 años de antigüedad.

"A pesar de la importancia de las agujas de hueso para explicar la dispersión humana global moderna, los arqueólogos nunca han identificado los materiales utilizados para producirlas, limitando así la comprensión de esta importante innovación cultural", escribieron los investigadores.