Sacerdote adicto a las apuestas
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Un abogado defensor busca la libertad condicional mientras la fiscalía pide una sentencia de casi tres años en una prisión federal para un sacerdote que admitió haber desviado 650.000 dólares de su parroquia en el noreste de Las Vegas para sostener sus hábitos de juego.

En documentos presentados ante la corte antes de ser sentenciado el viernes, el abogado del monseñor Kevin McAuliffe pidió al juez de la corte de distrito, James Mahan, permitir que McAuliffe, de 59 años, continúe con la terapia para combatir su adicción a las apuestas, que siga ejerciendo como sacerdote y restituya el dinero tomado de la iglesia de Santa Isabel Ana Seton en Summerlin.

Un fiscal asegura que 33 meses en prisión resulta una condena adecuada y no existe un motivo para darle a McAuliffe una segunda oportunidad.

McAuliffe se declaró culpable de tres cargos de fraude de correo federal el mismo día en que le fueron presentados en octubre.

El sacerdote admitió haber robado de la tienda de regalos, de la colección de cirios y de fondos de oración.