En el país latinoamericano se está preparando una oleada de noticias, ahora disfrutaremos del cuento ruso, en el que 'el malvado' Vladímir Putin trata de desestabilizar México.

Mientras me siento un momento en la computadora para leer las noticias, encuentro aquella que ofende a la inteligencia: "Rusia quiere hackear las elecciones mexicanas". Por un momento me produce risa, pero entonces recuerdo el gran cinismo del Gobierno mexicano y de sus medios para manipular la información.
Mexico
© CC BY 2.0 / Esparta Palma / Angel Celebrado

Así que no es de extrañar que nos encontremos con argumentos apocalípticos en donde los rusos dominarán el mundo. Con narraciones extraordinarias en donde el 'tío Putin' se frota las manos desestabilizando democracias, a través de sus miles de hackers que él mismo comanda. Imaginen la escena, las democracias occidentales ardiendo en llamas con las carcajadas diabólicas de Vladímir Putin de fondo.

Cualquiera se habrá dado cuenta de que se prepara una nueva guerra sucia en contra de la oposición. Los propagandistas del sistema se dedican a reciclar la noticia americana sobre la amenaza rusa. Como Martín Moreno, que escribe sobre el "Terrorismo Electoral", donde denuncia la intromisión de Rusia en las elecciones mexicanas del año 2018. La moda de todos los políticos corruptos en el mundo es culpar a Rusia. A estas afirmaciones se sumaron políticos como Quadri y el expresidente Calderón.

México es un país con medios de comunicación alineados con el poder del Estado, y es vox populi la corrupción de los periodistas, quienes reciben un chayo (soborno) a cambio de notas favorables al régimen. No es difícil entender que en nuestro país nunca pase nada. Los medios simulan valentía cuando hablan de la supuesta intervención rusa en las futuras elecciones mexicanas, pero callan en cuanto a los temas que afectan al interés nacional.

Le recuerdo a esos 'valientes' chayoteros, quise decir, columnistas, que México se ha visto vulnerado varias veces, pero no por Rusia, sino por EEUU, país al cual no se atreven si quiera a tocar con el pétalo de una rosa. Para ellos es normal y deseable que por lo menos tres presidentes hayan sido agentes de la CIA -Adolfo López Mateos, Gustavo Díaz Ordaz y Luis Echeverría-.

Los medios de comunicación callaron las miles de muertes en el Gobierno de Calderón y, como es costumbre, son cómplices. Sus analistas se preparan para justificar la crisis social y económica. Gracias a la enorme corrupción del país, tenemos una autoridad electoral sin credibilidad. Nos dicen que los rusos quieren desestabilizar al INE. La verdad es que desde el 2006 existen sospechas de fraude electoral y es evidente que tratan de ocultar su nula credibilidad.

Ante las acusaciones de hackeo ruso en México, solo déjenme decirles que EEUU tiene controlado a nuestro país desde hace muchas décadas y es muy probable que los mexicanos no hayamos elegido a ninguno de nuestros presidentes, incluyendo a los más recientes. Nuevamente, los medios alternativos e independientes como RT y Sputnik le dan una lección de libertad de expresión a otras naciones.