El nombre de Pedro Sánchez sigue sonando con fuerza en los pasillos del cuartel general de la OTAN en Bruselas, donde la figura del presidente español es una de las más cotizadas para suceder al noruego Jens Stoltenberg como secretario general.
Pedro Sánchez y Jens Stoltenberg en la Cumbre de la OTAN.
© Rodrigo Jiménez / EFEPedro Sánchez y Jens Stoltenberg en la Cumbre de la OTAN.
De hecho, la Alianza Atlántica va a esperar al resultado de las elecciones generales en España, convocadas por Sánchez el 23 de julio, para elegir al sucesor de Stoltenberg. Se esperaba que ese nombre se anunciara en la próxima cumbre de la OTAN, que se celebrará en Vilna (Lituania) los días 11 y 12 de julio, pero en la capital belga ya se habla de que el proceso está muy verde y se pospondrá hasta después del verano.

Esa demora permitirá conocer la 'disponibilidad' de Sánchez para el cargo, es decir, si ha ganado las elecciones del 23J y continúa siendo presidente del Gobierno español o si, por el contrario, abandona la Moncloa y se intensifican los contactos diplomáticos para postularse para ese cargo de gran calado internacional.

La elección del secretario general "se lleva a cabo mediante consultas diplomáticas informales entre los países miembros, que presentan candidatos para el puesto", según recogen la propia organización, cuyos estatutos exigen además "un consenso" entre todos los socios.

El cargo lo ocupado siempre una figura europea de alto nivel desde 1952, entre ellas Javier Solana (1995-99), aunque la aprobación del presidente de EEUU es imprescindible, dada la aportación de ese país en el presupuesto de Defensa.

Stoltenberg ya ha comunicado que no tiene intención de seguir al frente de la OTAN más allá del mes de octubre, cuando concluye su actual mandato, uno de los más longevos tras ser prorrogado por la guerra de Ucrania y que cumple nueve años.

El nombre de Sánchez como sucesor de Stoltenberg suena desde hace tiempo y ganó muchos enteros tras la celebración de la cumbre de la OTAN en Madrid, un éxito organizativo y diplomático del presidente español, que logró los elogios de todos los aliados.