Investigaciones recientes indican que el virus informático Flame podría ser parte de una "familia" mucho más grande de programas maliciosos.

Se cree que Flame ha penetrado en sistemas de información confidencial de Irán. De hecho se ha vinculado con Stuxnet, el virus que entre 2009 y 2010 atacó varias instalaciones nucleares iraníes. Stuxnet es considerado el primer virus específicamente diseñado para afectar sistemas industriales.

Un análisis sobre el servidor que controla Flame señala que tres piezas similares del código no han sido descubiertas aún.

El estudio indica que Flame se remonta al año 2006, mucho antes de lo que los expertos creían. Asimismo, se le ha asociado con Duqu, un virus que también ha infectado algunos sistemas iraníes de computación.

El informe fue realizado por las compañías de seguridad informática Symantec, Kasperksy, Crypto Labs y la Unión de Telecomunicaciones Internacionales de las Naciones Unidas.