Temperaturas altas y un sol abrasador se cobraron la vida de tres personas en Japón y enviaron a más de 2.500 al hospital en una semana.

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El martes llegaron a registrarse 39,1 grados en la prefectura de Yamanashi (centro) y más de 35 en muchas regiones del país.

Un total de 2.594 personas tuvieron que ser hospitalizadas en la primera semana de julio y tres de ellas murieron.

Más del 42% de ellas tenían al menos 65 años de edad, precisó la agencia de gestión de desastre. Entre las personas hospitalizadas también destacan los niños.

Un anticiclón se instaló en el archipiélago en los últimos días, poniendo fin a la temporada de lluvias que suele terminar a mediados de julio en algunas regiones.