Bolivia. Cuatro personas murieron y doce están desaparecidas a causa de las nevadas caídas en el país en la última semana. Diez ciudadanos son buscados en el municipio de Cocapata, en Cochabamba, y otros dos en Tinguipaya, Potosí, departamentos donde además se registraron los decesos y donde el frío y la falta de forraje causaron la muerte de 7.424 camélidos.

El martes, el alcalde de Cocapata, Pedro Padilla, informó sobre la muerte del comunario José Apaza, quien falleció por hipotermia. Por la misma causa perdieron la vida Salvador Mamani y Rufina Quispe en Tinguipaya, Potosí. Ayer en la mañana se reportó que en el norte potosino, en la localidad de Colquechaca, una mujer de aproximadamente 60 años murió el lunes, también debido a la nevada.

"Salió de su casa para cobrar su renta dignidad el lunes, fecha en la que falleció cerca a la carretera, fue encontrada el martes y ayer recién la enterraron", reportó un familiar a radio Erbol.

La nieve también originó que al menos 12 personas sean reportadas como desaparecidas. Dos son buscadas en el municipio de Tinguipaya y diez en Cocapata.

En el caso de Cochabamba, el alcalde Padilla ofreció ayer en la mañana una conferencia de prensa en la que informó que al menos 10 personas fueron reportadas como desaparecidas tras la intensa nevada que cayó el fin de semana, que además provocó la muerte de 7.424 camélidos por frío y falta de forraje. Los desaparecidos son pobladores de las localidades de Laca Laca, Jatún Rumy y Huayllas.

En Tinguipaya se reportó la desaparición de otras dos personas por lo que la Alcaldía de ese municipio inició operativos de búsqueda, según informó a radio Erbol el burgomaestre Jaime Choque.

"Los comunarios están muy preocupados. Por lo menos dos personas dicen que (están desparecidas), no se sabe dónde han ido y están en investigación. No se sabe si han llegado a otras partes o no, pero están en búsqueda", afirmó.

La autoridad explicó además que centenares de cabezas de ganado camélido (llamas) no tienen forraje para alimentarse y que al menos 5.000 personas en la provincia Tomás Frías fueron afectadas por el fenómeno natural.

En el caso de Cocapata, Padilla informó que 52 comunidades del municipio aun se encuentran aisladas y que 15 unidades educativas tuvieron que suspender labores escolares debido a que gran parte de los estudiantes padecen de enfermedades respiratorias y de problemas en la visión.

Dijo que la muerte de 7.424 cabezas de camélidos, entre llamas, ovejas, vicuñas y alpacas, provocó una pérdida económica de aproximadamente 2.7 millones de bolivianos.

Ante este panorama, la secretaria de la Madre Tierra de la Gobernación de Cochabamba, Tatiana Sanabria, informó a La Razón Digital que el miércoles fue activado el Centro de Operaciones de Emergencia (COE) que concentrará su ayuda fundamentalmente en la ayuda a los damnificados y en el sector agrícola afectado.

"En estos días se va a trasladar alimento, estamos hablando de más de cinco volquetadas de forraje y avena que ha pedido el alcalde (de Cocapata). También se va a dotar de manera inmediata de colchones, frazadas y vituallas a los pobladores del sector que han perdido sus cultivos agrícolas", anunció.

Sanabria agregó que la alimentación del ganado y las raciones secas a los comunarios están a cargo de Defensa Civil y el Programa Mundial de Alimentos, además de otras instituciones, y anunció que la Secretaría de Desarrollo Humano de la Gobernación podrá a disposición médicos y atención gratuita para la gente que así lo requiera.

Sobre la situación de las carreteras afectadas por el fenómeno climático, señaló que el Servicio Departamental de Caminos (SEDCAM) se encuentra realizando trabajos en el sector para habilitar las rutas que aun no pueden ser transitadas . " No se va a parar hasta tener expeditas todas las vías, especialmente los ejes troncales y los caminos secundarios para llegar con la ayuda correspondiente", anunció.

Informó que el camino hacia el municipio de Morochata ya se encuentra totalmente expedito, aunque los vehículos aún deben circular con precaución, y advirtió que para los próximos días se prevé una 'ola de frío', por lo que actualmente trabajan en la prevención y en la mejorar los sistemas de comunicación.

"El principal problema en el que hemos tropezado en la nevada fue en intentar comunicarnos con los municipios en problemas y eso fue una falencia que no nos permitió llegar a la zona. Muchas de las personas tuvieron que salir a pie para tomar contacto con nosotros e informarnos por donde podríamos entrar porque los accesos principales estaban colapsados con nieve", dijo.