A las afueras de la sede de la Cancillería colombiana, Alejandro Muñoz alzó la voz, y con su banda presidencial puesta, y en tono de humor, habló sobre su plan de Gobierno.
Alejandro Muñoz, presidente autoproclamado Colombia
© Cortesía de Dan CohenAlejandro Muñoz, 'presidente' autoproclamado de Colombia.
El colombiano Alejandro Muñoz, con una réplica de la banda presidencial puesta, se autoproclamó el lunes como presidente de ese país y gritó: "Mi primer acto de gobierno es declarar la paz", en medio de una manifestación en contra de la reunión del Grupo de Lima, que se celebró en el Palacio San Carlos, sede de la cancillería colombiana, en Bogotá, donde participó el vicepresidente estadounidense, Mike Pence.

En las imágenes compartidas por el periodista Dan Cohen en sus redes sociales, se observa el cerco policial en el perímetro de la construcción del siglo XVI, donde se realizó el encuentro, al que asistió el autoproclamado "presidente encargado" de Venezuela, Juan Guaidó, un día después de que fallara su intento de ingresar a la fuerza 'ayuda humanitaria' al país sudamericano.


Una voz de entre el grupo de personas que protestaban a las afueras de la sede de Relaciones Exteriores, con pancartas de 'No a la guerra', vociferó: "Duque no me representa", en referencia al presidente colombiano, quien fungió como anfitrión de este encuentro y pidió intensificar el "cerco diplomático" sobre el Gobierno de Nicolás Maduro, al que ha llamado en repetidas ocasiones "dictador".

El autoproclamado presidente de Colombia, en su improvisado discurso en clave de humor, dijo: "Sí a la paz, no a la guerra, no más narcotráfico, no más neoliberalismo", mientras los manifestantes que lo rodeaban lanzaban vítores y aplausos.

Tensión previa

El ambiente previo a la reunión estaba cargado de expectativa debido a las posibles decisiones que se tomarían, luego de que el presidente estadounidense, Donald Trump, afirmara en varias oportunidades que "todas las opciones sobre Venezuela estaban sobre la mesa".

Por otra parte, los presidentes y cancilleres que asistieron a la reunión han manifestado su reconocimiento al diputado Guaidó como "presidente interino", han pedido aumentar la presión sobre Venezuela y han catalogado a Maduro de "dictador", "usurpador" e "ilegítimo".

El saldo del sábado 23 de febrero, fecha anunciada por el diputado opositor venezolano para el ingreso de la 'ayuda humanitaria', fue de al menos 300 personas heridas en la frontera colombo-venezolana, donde la violencia se inició cuando varios militares desertores tomaron dos vehículos blindados de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y rompieron el cerco venezolano de seguridad en el puente Simón Bolívar.

Desconocimiento de Duque

Los manifestantes coincidieron en el rechazo al Gobierno de su país. "Los colombianos desconocemos a Iván Duque", quien según las encuestas ha subido sus índices de popularidad por su "posición firme ante Maduro".

"Queremos un Ejército para la paz y no para la guerra", afirmó Muñoz. En la semana previa, los jefes del Comando Sur y del Ejército colombiano había sostenido reuniones para abordar el tema de la 'ayuda humanitaria' a Venezuela, lo que había generado tensión y especulaciones sobre un eventual apoyo a un acción militar contra el país vecino.


Muñoz además dijo que su primera "acción internacional" sería "arreglar con el Gobierno de EE.UU. para que nos saque sus bases militares de este país". En 2009, el entonces presidente Álvaro Uribe, firmó un acuerdo militar con su par estadounidense Barack Obama, "para combatir el terrorismo y el narcotráfico", a pesar de la negativa de países vecinos como Venezuela y Ecuador.

"EE.UU. necesita ayuda humanitaria"

Entre los gritos de aliento y grabaciones con teléfonos móviles, Muñoz le envió un mensaje a EE.UU.: "Tienen que hacer la verdadera democracia, detrás de cada presidente, hay una guerra". "La democracia y el gran pueblo trabajador y artístico deben bajar a esos presidentes, esos Trump, esos Bush".

De igual manera, se refirió a la necesidad de una "ayuda humanitaria urgente para ese país, "porque son los mayores consumidores de drogas del planeta", según lo reconoció el propio exsecretario de Estado, Rex Tillerson, en un viaje a Perú.

Al ser consultado por uno de los presentes de cuándo sería el nombramiento de un nuevo embajador de Colombia ante Washington, dijo que ya se encontraba allá, representado por los millones de colombianos que se encuentran trabajando en ese país.