Traducido por el equipo de SOTT.net en español

Los residentes de una ciudad griega programada para acoger a una nueva oleada de solicitantes de asilo salieron a las calles para protestar por la medida, en medio de la creciente ira por la afluencia de refugiados que han entrado en el país.
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Los manifestantes anti-inmigrantes en la ciudad norteña de Tesalónica pidieron a Atenas que expulsara a todos los inmigrantes ilegales y cerrara la frontera a los inmigrantes. Las imágenes de la marcha mostraban a los manifestantes portando pancartas y banderas griegas, mientras que un activista al frente de la procesión sostenía un icono de la Virgen María.

Los activistas piensan que sus creencias ortodoxas están bajo el asedio de una "amenaza islámica", según la agencia de videos Ruptly.

Salónica y las ciudades circundantes han sido seleccionadas para albergar a miles de migrantes que Atenas quiere transferir desde instalaciones superpobladas en las islas griegas a tierra firme. Según los informes, durante el fin de semana, alrededor de 900 personas fueron transferidas de las islas griegas a sitios en tierra firme. El gobierno planea reubicar a 20.000 refugiados en total para fin de año.

Grecia ha acogido a «40.000 migrantes y refugiados» solo en los últimos cuatro meses, dijo el ministro de Migración, Giorgos Koumoutsakos, a los medios locales. Agregó que el continente debe «mostrar solidaridad» con las regiones fronterizas que han «llevado la peor parte» de la afluencia de migrantes.

Atenas ha estado reiteradamente en desacuerdo con Bruselas sobre la política migratoria de la Unión Europea. El país, ya obstaculizado por problemas económicos, ha sido uno de los principales puntos de entrada para los refugiados que llegan a Europa, y ha estado soportando la carga de albergar a decenas de miles de solicitantes de asilo.