El resultado de la XVIII cumbre del G20 en Nueva Delhi, la India, es una muestra de que Estados Unidos y los países occidentales ya no imponen al resto del mundo su visión de lo que está bien y lo que está mal, consideraron especialistas consultados por Sputnik.
G20 summit
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"Hay una transformación, una nueva percepción de la realidad en la que se tiene que entender que este desafío que se está haciendo desde el Sur global obedece a una nueva visión de que ya no únicamente se va a imponer lo que es bueno o malo desde el punto de vista occidental", dijo Carlos Manuel López Alvarado, maestro en pedagogía e internacionalista de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

"Hay un 'ya basta' de países que alzan la voz, un 'ya basta' de estar viendo los acontecimientos desde una sola mirada; se tienen que englobar diferentes miradas para darle solución a los problemas mundiales", afirma el profesor en la licenciatura en Relaciones Internacionales en la UNAM, al responder a un cuestionamiento sobre el fracaso del intento de aislar a Rusia en la cumbre celebrada en Nueva Delhi.

La aplicación de la Iniciativa de Granos del Mar Negro con garantía del suministro de fertilizantes rusos, el respeto de principios de la Carta de la ONU en el marco del conflicto ucraniano, la reforma de la Organización Mundial del Comercio (OMC) e incorporación de la Unión Africana fueron algunos de los puntos clave de la declaración final del encuentro celebrado en la capital de la India.

Pluralidad sobre unanimidad

Para el profesor Alejandro Martínez Serrano, licenciado en Relaciones Internacionales, maestro en Seguridad Nacional por la UNAM y catedrático del Centro de Estudios Superiores Navales (CESNAV), el peso de los países del sur en el mundo se ve reflejado en el hecho de que, entre el grupo de las 20 economías más desarrolladas del planeta, hay al menos nueve países que representan al sur global.

Y en este sentido, afirma el catedrático, es imposible lograr una unanimidad en el G20 respecto a temas como el conflicto en Ucrania. "El G20 es plural y no hay una tendencia pro-Estados Unidos o pro-Unión Europea, cualquier decisión tiene que pasar por diferentes opiniones de los integrantes de las 19 economías y la de la UE", dice el académico.

"Para una propuesta que pudiera consistir en una condena a Rusia (...) no es posible tener una unanimidad en este amplio margen de maniobra que puede representar una negociación entre estos actores", explica el maestro Martínez en entrevista con Sputnik.

Un desafío a la hegemonía de EEUU

De acuerdo con el maestro López Alvarado, lo que se está viendo en las cumbres como la del G20 en India o en la de los BRICS hace unas semanas en Sudáfrica, es un desafío de los países del sur global a la hegemonía de Estados Unidos.

"Tenemos que comprender que el proyecto que impulsa EEUU a nivel mundial es un proyecto que busca homologar las distintas realidades para privilegiar la sociedad de consumo", explica el maestro egresado de la UNAM. "No debemos perder de vista que no todas las personas tienen acceso a las mismas condiciones y, por lo tanto, hay organizaciones y movimientos sociales que buscan revertir estas circunstancias, y algunas de estas voces son representadas por gobiernos que buscan justamente desafiar estas instituciones globales occidentales, y la cumbre obedece a estas inquietudes".
"EEUU ve cada vez más cercada su hegemonía en términos económicos ante el crecimiento de otras economías (...) del sur que están teniendo importantes aportes a la competencia a nivel internacional principalmente la República Popular de China", afirma el maestro Martínez Serrano.
"Es un mundo cada vez más competitivo en términos económicos y la economía de EEUU se ve acotada en este sentido", afirma el especialista.


Para el profesor López Alvarado, el orden mundial emanado de la Segunda Guerra Mundial produjo instituciones internacionales abocadas a reproducir ideas y patrones culturales que únicamente privilegiaban y engrandecían a ciertas zonas geográficas y grupos de países y que ahora se están transformando o incluso están naciendo nuevas instituciones que buscan revertir las condiciones.

El empoderamiento de los países del sur

El académico puntualiza, sin embargo, que la transformación de estas instituciones requiere de acciones grupales. "Se tiene que actuar de manera grupal, cooperativa, organizacional, porque en lo individual va a ser imposible incidir en esas instituciones occidentales", afirma.
"Entre más voces haya, más grupos de países, más recursos, y más visiones y un hermanamiento de países se podrá incidir en la transformación de las instituciones".
El internacionalista de la UNAM afirma que la transformación que se está viviendo hacia un mundo multipolar enfrentará resistencias por parte de EEUU y los países occidentales que no van a querer "soltar o compartir el poder".

Ante ese escenario, afirma López Alvarado, hay dos respuestas posibles: la ideal y la real. La ideal es que esa resistencia se resuelva con diplomacia, con cumbres, con cooperación, con trabajo en foros internacionales acuerdos. La real, dice, tiene que ver con el empoderamiento de los países del sur.
"Cuando se empoderen, van, no únicamente solicitar a través de la diplomacia, que se hable de un nuevo crecimiento, de una forma de comprender la economía global, sino a través de arrebatar estos cotos de poder ¿cómo? Con la creación de nuevas instituciones como las que promueve el grupo BRICS", sostiene el académico.