Más de 115.000 de personas fueron evacuadas desde las zonas peligrosas de la región rusa de Kursk después de que Kiev lanzara una incursión en esa provincia, informó el primer vice primer ministro, Denís Mánturov, durante una reunión sobre la situación en las regiones de Bélgorod, Briansk y Kursk celebrada por el presidente ruso, Vladímir Putin.
Russian evacuee
© Sputnik / Ilya Pitalev
En este contexto, Mánturov indicó que fueron desplegados centros de alojamiento temporal y alimentación en 29 regiones del país.

A su vez, las autoridades de Kursk cifran en unas 133.000 las personas desplazadas por las hostilidades, declaró el gobernador en funciones de la región, Alexéi Smirnov.
"Ocho distritos de la región de Kursk con una población de 152.566 personas formaron parte de la zona de reasentamiento y evacuación. A la fecha de hoy [el 22 de agosto], 133.190 personas se han ido, quedan 19.376 personas, seguimos reasentando a personas en lugares seguros", comentó Smirnov al presidente ruso.
Asimismo, Smirnov reportó un aumento de los ataques aéreos de las Fuerzas Armadas de Ucrania en la región.

"Todas las actividades se ven complicadas por el aumento significativo del número de ataques aéreos que sufre actualmente la región de Kursk", declaró.

En particular, continuó, es difícil evaluar los daños causados ​​a los ciudadanos por ataques de las Fuerzas Armadas de Ucrania.

Al mismo tiempo, el funcionario aseguró que la región tiene reservas de medicamentos y sangre, mientras que continúa el reasentamiento de los ciudadanos desde la zona fronteriza de cinco kilómetros.

En cuanto a la región de Bélgorod, la situación sigue complicada por los continuos bombardeos artilleros y ataques de drones ucranianos, comentó el gobernador de esa provincia rusa, Viacheslav Gladkov
"La situación sigue complicada. En primer lugar, a causa de los bombardeos de artillería y sistemas de lanzacohetes múltiples, así como ataques de vehículos aéreos no tripulados ucranianos", detalló Gladkov en la reunión con el presidente Vladímir Putin.
El gobernador comunicó que últimamente mejoró la interacción con el Ministerio de Defensa ruso.
"Estoy seguro de que muy pronto esa interacción hará cambiar la situación en lo que respecta a la seguridad de los ciudadanos", remarcó el gobernador.

El pasado 6 de agosto el Ejército ucraniano inició una incursión armada en la provincia de Kursk.

Un alto cargo del Ministerio de Defensa ruso, el mayor general Apti Alaudínov, estima que Kiev implicó hasta 12.000 efectivos en esa ofensiva y que procura enviar refuerzos, aunque se les están agotando.

El presidente ruso, Vladímir Putin, prometió "una digna respuesta" a la provocación de Kiev, al que acusó de disparar indiscriminadamente contra instalaciones civiles, y reafirmó que Rusia logrará todos los objetivos de su operación militar especial en Ucrania.