La ola de protestas de los 'indignados' estadounidenses ha llegado prácticamente a todos los rincones del país. Esta vez la ciudad de Tulsa, la segunda más grande del estado de Oklahoma, sufrió una madrugada violenta, marcada por la brutalidad policial.

Decenas de manifestantes, que se reunieron en una marcha pacífica en la plaza del parque central, fueron detenidos en plena noche por las fuerzas de seguridad, algunos de ellos enmascarados.

Las detenciones se produjeron poco después de la sangrienta jornada de protestas que se produjo este jueves en la ciudad de Oakland, donde la huelga general, con unos 7.000 manifestantes, se transformó en una batalla campal.

Allí, la Policía desalojó a los activistas a sangre y fuego, usando contra los 'indignados' gases lacrimógenos y balas de goma. Centenares de participantes de la marcha fueron detenidos, mientras que muchos sufrieron graves lesiones e incluso varios activistas tuvieron que ser hospitalizados.

'Ocupa Tulsa' junto a ' Ocupa Oakland' son dos ramas de 'Ocupa Wall Street', el movimiento que protesta contra el actual sistema económico estadounidense, al considerar que fomenta las desigualdades sociales y la avaricia de las grandes empresas.

Se espera que otra manifestación, encabezada esta vez por los líderes de las comunidades latina y afroamericana, marche el próximo lunes por las calles de Nueva York, para unirse a los 'indignados' de Wall Street.