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© DesconocidoEs en repudio a los despidos que se están produciendo en grandes fábricas.
Los efectos de la crisis también repercuten en China, donde se están produciendo una serie de huelgas y protestas a raíz de los despidos en algunas fábricas que comenzaron a ajustar sus gastos. Debido a la debacle económica internacional, muchas firmas con sede en la potencia asiática atraviesan serios problemas de equilibrio presupuestario.

Ayer, miles de trabajadores manifestaron frente Hi-P, una empresa tecnológica ubicada en los suburbios de Shangai, contra la decisión de la firma de trasladar la planta a otra provincia, despidiendo previamente a 1.000 empleados . La policía intervino y se generaron enfrentamientos que terminaron con detenidos y varios heridos.

Como Hi-P, muchas fábricas están abandonando Shanghai rumbo a otras ciudades, huyendo de los altos costos de la capital económica china en términos de terreno, traslados y mano de obra. El incidente de ayer causó preocupación en las autoridades porque Hi-P, que se dedica a fabricar piezas para productos de Apple, Blackberry y Motorola, es una de las empresas más grandes y antiguas. Fue fundada en 1980 y tiene 25 fábricas en Asia, América y Europa.

Pero el problema va más allá de Hi-P. La ola de manifestaciones y huelgas de obreros y trabajadores chinos también comprende, entre otros, a las sucursales de la cadena de supermercados inglesa Tesco. En Jinhua, provincia oriental de Zhejiang, cientos de empleados salieron ayer a la calle para protestar contra los recortes de personal que decidió la dirección de la firma. Los empleados bloquearon el ingreso a los centros comerciales y gritaron contra la empresa, mostrando carteles donde piden el respeto a sus derechos.

A esto se sumó una manifestación de más de 10.000 personas en Dongguan, provincia de Guandong, la más afectada por la crisis, donde la gente de concentró para reclamar por sueldos atrasados.También hubo manifestaciones contra Apple, IBM y otras grandes compañías. El temor de los trabajadores es que las constantes reorganizaciones anunciadas se transformen en despidos masivos.