El encargado de prensa de la Policía Metropolitana de Londres (Scotland Yard), Dick Fedorcio, dimitió hoy tras ser implicado en el escándalo de las escuchas telefónicas ilegales.

De acuerdo con la denuncia, Fedorcio actuó a favor de la concesión de un contrato de asesoramiento a un exejecutivo del tabloide sensacionalista News of the World, desaparecido en julio último como consecuencia de la ola de quejas por el espionaje telefónico, que implicó a altos directivos del emporio mediático.

El pasado año, Scotland Yard en colaboración con la Comisión Independiente de Quejas a la Policía (IPCC), inició un proceso investigativo el cual puso al descubierto pruebas del vínculo entre el funcionario de seguridad con encargados de prensa implicados en el citado escándalo.

La renuncia de Fedorcio pone fin al proceso disciplinario por el cual se le iba a investigar, según IPCC.

Esa entidad reveló que el jefe de prensa de la policía incurrió en el delito al conceder un contrato de asesoramiento a la empresa de Relaciones Públicas Chamy Media, propiedad de Neil Wallis, antiguo directivo del periódico News of the World.

El espionaje teléfónico en Reino Unido se remonta al 2000, pero apenas en 2006 se iniciaron las averiguaciones por Scotland Yard, que quedaron en suspenso hasta principios de 2011, tras nuevas evidencias.

Ese año detuvieron a 20 sospechosos de interceptar buzones de voz de celebridades, políticos, periodistas, e incluso, de familiares de las víctimas de los atentados de 2005 en Londres y de soldados británicos muertos en Irak y Afganistán.

El caso de las escuchas telefónicas desató una crisis política en el país europeo y críticas al gobierno del primer ministro David Cameron, por las prácticas poco fiables en el sistema público, según los demandantes y la oposición.