Cerca de cinco millones de personas han sido afectadas por las inundaciones en el sur de Pakistán, dijo a los reporteros en la sede de la ONU el vocero del organismo mundial, Martin Nesirky, citando estimaciones del gobierno pakistaní.

"Las agencias de la ONU y organizaciones no gubernamentales están proporcionando asistencia en apoyo de los esfuerzos asistenciales encabezados por el gobierno", dijo Nesirky en la conferencia de prensa cotidiana.

A principios de septiembre se registraron inundaciones repentinas en las provincias pakistaníes de Sindh, Punyab y Balochistán, lo que desplazó a 270.000 personas.

"Aunque se han distribuido miles de paquetes de alimentos y otros suministros, la vida de la gente sigue en peligro en las áreas del país afectadas por las inundaciones", dijo el coordinador humanitario de la ONU en Pakistán, según informes de Nesirky.

"No podemos permitir que la crisis de las inundaciones se convierta en una emergencia olvidada", dijo el vocero.

El Fondo Central para la Respuesta a Emergencias, una división de la oficina de la ONU para Asuntos Humanitarios, ha destinado 10 millones de dólares para brindar ayuda en forma de alimentos, agua, atención médica y refugio para las familias afectadas por las inundaciones.