Dos de tres. El Fondo Monetario Internacional se postula como la institución con un mayor número de capitanes en el calabozo, Rodrigo Rato y Dominique Strauss Kahn, un triste récord para una institución que se erige como el guardián de la economía mundial.

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© ABCDe izquierda a derecha Christine Lagarde, Dominique Strauss Kahn y Rodrigo Rato
Curiosamente, el mismo día en que el exministro español fue conducido al calabozo por blanqueo de dinero, Christine Lagarde, la actual directora gerente del Fondo, aseguró durante un coloquio en la Universidad de George Washington que "todos, incluso los ricos, tenemos que pagar impuestos".

El Fondo Monetario Internacional forma parte de las organizaciones que ayudan al Grupo de los 20 a frenar la evasión de impuestos y es, en esencia, el centinela que vela por la estabilidad financiera de la economía mundial. Sin embargo, los tres últimos directores gerentes de la institución, incluida la propia Lagarde, se han visto envueltos en distintas investigaciones y causas judiciales que han puesto en duda la credibilidad del Fondo. Rato, quien tomó las riendas de la institución con sede en Washington entre 2004 y 2007, pudo haber llevado a cabo sus actividades de blanqueo de dinero durante su periplo en el Fondo. La institución declinó realizar cualquier comentario al ser preguntada por este hecho.

El FMI exige a sus directores "los máximos estándares éticos", entre los que se incluyen "integridad, imparcialidad y discreción". En referencia a las inversiones personales de sus capitanes, así como los de sus familiares directos, la institución insiste en que la gestión de los mismos "no deben generar conflictos de interés". Al mismo tiempo, el Fondo requiere que sus altos directivos presenten anualmente una certificación financiera, donde se especifiquen los activos y de deudas, así como transacciones que puedan considerarse "relevantes".

Rato se embolsó durante los tres años y cinco meses como funcionario del FMI un total de 1,57 millones de dólares, según los datos publicados en la prensa española. Por aquel entonces su sueldo base anual era de 391.440 dólares más un extra de 70.070 dólares libres de impuestos y sin necesidad de justificar. También podría haber recibido una pensión vitalicia de 80.000 dólares anuales. La actual investigación en marcha se sumaría a las anteriores por falsificación de cuentas, administración desleal, alteración de precio y apropiación indebida, si tomamos en cuenta la polémica salida a bolsa de Bankia.

Sin embargo, el sucesor del español en el FMI, Dominique Strauss-Kahn, no sólo fue invitado a dimitir tras ser denunciado por la violación de Nafissatou Diallo, una camarera del hotel Sofitel de la Gran Manzana y del que fue absuelto, sino que también fue imputado por su presunta relación con una red de prostitución en el caso Carlton. En esta ocasión, las prostitutas retiraron los cargos de proxenetismo contra el galo.

Lagarde, la encargada de recoger sus testigo al frente del FMI, también ha tenido que responder ante los tribunales franceses por "negligencia" en un polémico caso de arbitraje privado entre el empresario Bernard Tapie y el banco Crédit Lyonnais. Según las condiciones del contrato con el Fondo, la exministra de finanzas gala gana 467.940 dólares anuales netos al que habría que sumar otros 83.760 dólares sin necesidad de ser justificados y para mantener los "intereses" del Fondo. La francesa se subió el sueldo un 11 por ciento en comparación con el de Strauss Kahn, quien se embolsaba 420.930 dólares anuales además de 75.350 dólares en gastos sin justificar.