Los habitantes del archipiélago de Vanuatu, en el Pacífico sur, se enfrentan a su segunda evacuación en siete meses después de que un volcán entrara en erupción la semana pasada. Las autoridades del país han declarado el estado de emergencia en la isla de Ambae, en el norte del archipiélago, donde residen 11.000 personas que ya fueron evacuadas el pasado septiembre por un incidente similar. Esta vez, sin embargo, el traslado será definitivo.
Imagen aérea del volcán Manaro, que ha obligado a evacuar de forma definitiva una isla de Vanuatu.
© AFPImagen aérea del volcán Manaro, que ha obligado a evacuar de forma definitiva una isla de Vanuatu.
Las autoridades de la República de Vanuatu, un país de más de 250.000 habitantes y 87 islas, han anunciado su intención de reubicar de forma permanente en mayo a los ciudadanos de Ambae, los más perjudicados por la erupción del volcán Manaro, el más activo del mundo. La expulsión de gases y cenizas del cráter del volcán ha enterrado huertos y cultivo y provocado a los isleños problemas respiratorios y de salud, como reacciones dérmicas e infecciones de pecho.

Búsqueda de terrenos

"Parte de la isla estaba oscura por el humo y la lluvia de cenizas y la gente se ha quedado encerrada sin poder salir al exterior" ha contado un residente a los medios locales. "La gente está muy asustada".

La policía y las agencias de emergencia se encuentran ya en la isla, mientras que se espera que el Ejército llegue a finales de la semana para organizar la evacuación masiva. Por su parte, el Gobierno del archipiélago se encuentra en negociaciones con los propietarios de tierras en las islas vecinas de Maewo y Pentecostés para ubicar en ellas de forma permanente a los vecinos de Ambae.