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Unos 14 heridos dejaron los enfrentamientos de los manifestantes con la policía en Atenas. Miles de personas salieron a las calles para protestar contra las medidas de austeridad del gobierno.

Al menos 14 personas fueron heridas y otras 24 fueron detenidas para ser interrogadas, aseguró la policía. Un hombre, de unos treinta años, fue hospitalizado en estado crítico debido a los golpes que recibió en la cabeza, informaron fuentes médicas.

Las fuerzas de seguridad dispararon gases lacrimógenos después de que un pequeño grupo de violentos que antes habían destrozado basureros, paradas de buses y comercios en el centro de Atenas, les arrojaran piedras.

Los incidentes fueron limitados en comparación con manifestaciones previas en contra de los planes de austeridad de Grecia. La presencia de manifestantes en las calles también fue inferior en esta ocasión. La policía calcula en unas 20.000 las personas que salieron a protestar en Atenas y Tesalónica.

Grecia está llevando a cabo un programa de austeridad sin precedentes a cambio del préstamo de 110.000 millones de euros (158.000 millones de dólares) concedido por la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional hace un año para evitar la bancarrota.

Pero pese al gran esfuerzo realizado en 2010, cuando centenares de miles de griegos vieron sus salarios y sus pensiones reducidas y muchos perdieron sus empleos, el país no ha logrado cumplir los objetivos de reducción del déficit debido a que la economía se contrajo más de lo previsto.

"Grecia está muy por detrás del programa de consolidación presupuestaria en los primeros cuatro meses del año. Esto es porque los ingresos están por debajo del objetivo", dijo el analista del Commerzbank Cristoph Weil en una nota. "Sin medidas adicionales, el déficit en 2011 podría ser entre 5.000 y 8.000 millones de euros más de lo previsto", advirtió Weil.

El gobierno ha diseñado un nuevo programa para ahorrar unos 26.000 millones de euros en los próximos tres años para ayudar a reducir la enorme deuda de Grecia, que superará a finales de año el 150% del PIB.

También planea llevar a cabo un plan de privatizaciones que le reportará unos 15.000 millones de euros, incluyendo la venta de participaciones en varias empresas públicas.

Muchos griegos consideran que esta estrategia no servirá para nada. "Quieren suprimir derechos sociales adquiridos en las últimas décadas y llevarnos a la Edad Media para salvar a los bancos y a los banqueros", dijo Vangelis Papadoyiannis, de 46 años, empleado en IT.

"En mi empresa hubo más de 100 despidos en enero, nuestros salarios se han reducido en un 15% y todavía queda más por venir", dijo a la AFP. "Dijimos hace un año que las medidas del gobierno eran injustas y anunciamos que no tendrían efecto", dijo el líder del mayor sindicato griego GSEE, Yiannis Panagopoulos.

"Hoy, tristemente, nos están dando la razón", dijo en un comunicado. La huelga general decretada este miércoles, la segunda de este año, cerró los servicios públicos y alteró fuertemente el tráfico marítimo, ferroviario y aéreo.

La deuda de Atenas se eleva a 340.000 millones de euros, lo que hace pensar, incluso entre responsables griegos, que serán necesarias opciones alternativas para poder devolver el crédito a la UE-FMI para el 2013.

Expertos de la UE, el FMI y el Banco Central Europeo (BCE) se encuentran actualmente en Atenas para analizar la situación financiera y las reformas con el fin de desembolsar una nueva entrega de 12.000 millones de euros del paquete de ayuda comprometido el pasado año.

Hasta ahora, responsables europeos y griegos han rechazado la posibilidad de una reestructuración de la deuda pero algunos funcionarios de la eurozona han empezado a reconocer que Grecia necesita más ayuda, sobre todo, porque parece excluido que pueda captar nuevos fondos en el mercado libre dadas las altísimas tasas de interés, que superan el 15%.