Cuando aún faltan dos semanas para la constitución de la nueva legislatura en las Cortes, el presidente del poder Ejecutivo en funciones, Pedro Sánchez -él personalmente-, ha designado al presidente de la cámara alta del poder Legislativo.
Pedro Sánchez y Miquel Iceta en el Comité Federal del PSOE.
© ArchivoPedro Sánchez y Miquel Iceta en el Comité Federal del PSOE.
Al igual que solía hacer su predecesor, Mariano Rajoy, el señor Sánchez no se molesta en fingir una separación de poderes que nunca existió en el 78, como bien revela la mera existencia de la bancada azul reservada para el Ejecutivo en la residencia del Legislativo.

El Ejecutivo ha decidido que el presidente de la cámara senatorial del Legislativo sea Miquel Iceta, primer secretario del PSC. Antes de exponer el significado de esta designación a espaldas de la propia cámara -antes de que se constituya incluso- examinemos el significante.

¿Quién es Iceta? En la actualidad es el primer secretario del PSC. Antes de llegar a esta posición, Iceta era el portavoz parlamentario del grupo socialista en el Parlamento catalán. Este grupo impulsó un proyecto de nuevo Estatuto para Cataluña con Maragall.

Impulsado y elaborado por el PSC, este proyecto de nuevo Estatuto aprobado con el voto favorable del PSC y del señor Iceta el 30 septiembre de 2005 estableció en su preámbulo que España no era una Nación, sino un Estado plurinacional.

Y equiparaba la relación de Cataluña con lo que llamaba "los pueblos de España" en igualdad de condiciones que su relación "con el resto del mundo". El artículo 1 de este proyecto socialista de Estatuto decía: "Cataluña es una Nación".

El señor Iceta fue uno de los artífices de este proyecto de Estatuto. Cuando salió de Barcelona, era el Estatuto de Maragall -y de Iceta-, pero cuando volvió de Madrid era el Estatuto de Mas.

En la segunda sesión parlamentaria de la rebelión de la Generalidad, el 7 de septiembre de 2017, el señor Iceta afirmó en la tribuna de oradores que su aspiración era que Cataluña estableciera el marco político de toda España. Sus palabras exactas fueron:
"Queremos desarrollar el Estatuto y recuperar los elementos erosionados por la sentencia del TC a través de reformas de leyes orgánicas y de la propia Constititución".
Previamente había manifestado su rechazo a que Cataluña ejerciera "así" -con especial énfasis en este adverbio y en referencia al desarrollo de los acontecimientos de aquel momento- el derecho de autodeterminación.

Enumeró los tres puntos de lo que llamó la solución del PSC a la situación: a) Más autogobierno. b) Mejor financiación. c) España federal.

Esto es, Iceta pretende hacer de España un Estado federal porque esa es la voluntad del PSC, que ya había dejado esa misma impronta en la Declaración de Granada del PSOE en julio de 2013.

Iceta no sólo afirma que Cataluña sea una Nación y niega que España lo sea. Va más allá y pretende q, siendo Cataluña Nación y no España, los ciudadanos catalanes sean los exclusivos integrantes del sujeto constituyente español y que sean ellos quienes decidan todo por todos.

Los rebeldes de la Generalidad se han ganado a pulso y por los hechos ser calificados como supremacistas y racistas. ¿Qué podríamos decir del señor Iceta, que pretende negar a 40 millones de españoles sus derechos políticos y que éstos sean un privilegio exclusivo catalán?

Hasta ahora el significante. Analicemos el significado. La designación -que no elección, dado que ni el señor Iceta es hoy senador ni el Senado se ha constituido- de Iceta lanza distintos mensajes a distintos actores políticos.

A Podemos le dice que Sánchez y los grupos socialistas en el Senado y en el Congreso defenderán la tesis que los podemitas tomaron del proyecto de Estatuto catalán de 2005: cualquier territorio es una Nación, excepto España, que queda reducida a espacio plurinacional.

A los rebeldes de la Generalidad y a sus partidarios les dice, además, que el indulto que Iceta pidió al mes de comenzar la instrucción por la rebelión está desde este momento sobre la mesa ante la eventualidad de una sentencia condenatoria por parte del Tribunal Supremo.

Al PNV y a Bildu les comunica que Sánchez y el Legislativo controlado por el Ejecutivo socialista está dispuesto a favorecer un eventual proceso de federalización de España. Recuerde, amigo lector, que federación es la unión de lo que está previamente separado.

La designación de Iceta como presidente del Senado es el primer paso hacia un proceso federalizante de España que nos devolverá a los fracasos de 1873, al conflicto intestino y a la inseguridad jurídica con ciudadanos de primera y de segunda: la ruptura de la Nación.